Análisis 'Rory Mcllroy PGA Tour', ¡bola vaaaa!

Todos los que estamos metidos en mayor o menor medida dentro del mundo de los videojuegos sabemos del papel que juega Electronic Arts dentro del género deportivo. La compañía americana tiene casi por completo el monopolio de la categoría, con franquicias como 'FIFA' o 'Madden NFL', por citar un par a modo de ejemplo. Dentro de este grupo se encuentra 'PGA Tour', la IP enfocada a trasmitir todas las sensaciones que se viven al participar en un abierto de golf, un deporte que pese a no cuajar en el gran público, cuenta con un buen grupo de adeptos tanto en Europa como en Estados Unidos.

Lavado de imagen

Esta licencia estuvo durante muchísimos años ligada al nombre de Tiger Woods, el mejor golfista que yo he visto nunca, los números así lo respaldan aunque después su comportamiento fuera del green no sea un buen espejo en el que mirarse. Por todos es sabido los líos de faldas en los que estuvo metido el astro americano, así como todos los problemas que esto le generó sobretodo a nivel de sponsors. Pues bien, EA Sports parece que ya ha desvinculado por completo su marca a la imagen del "Tigre" y es que por primera vez desde el año 1998 (de hecho, yo no recuerdo un juego de golf sin el nombre de Tiger o su imagen en portada) y después de tomarse un año sabático, 'PGA Tour' vuelve con una cara nueva en la portada, el británico Rory Mcllroy.

Para muchos de vosotros este nombre no significará nada, yo me encontraba en la misma situacion no voy a engañaros y es que lo que he visto de golf en toda mi vida, se limita a algún que otro hoyo de la Ryder Cup. Investigando un poco por la red de redes, me encontré con que Rory Mcllroy es uno de los golfistas con mayor proyección, aunque ha día de hoy ya es uno de los mejores de la PGA habiendo conseguido ser durante nada más y nada menos que número uno mundial durante 80 semanas. Con tan solo 26 años, se ha alzado ya con cuatro grandes torneos como son el Abierto de Estados Unidos, el Abierto británico y el campeonato de la PGA en dos ocasiones. Estos títulos unidos a su corta edad, hacen ser realmente optimistas con la carrera del joven golfista, que seguro estará deseoso de repetir estos éxitos, esta vez de la mano de EA Sports.

El resultado final de la unión de la compañía americana y el golfista británico, es el título que hoy analizamos en estas líneas, 'Rory Mcllroy PGA Tour', una nueva alianza que solo el tiempo nos permitirá saber si es tan fructífera para ambas partes como la que en su día protagonizo Tiger.

Centrándonos ya en lo que nos ofrece 'Rory Mcllroy PGA Tour' podemos decir sin ningún miedo, que el juego no será especialmente recordado. El título viene a engrosar una pequeña lista de decepciones en la que los juegos deportivos (salvo alguna excepción como 'NBA 2K') se han empeñado a entrar, sin ir más lejos están los últimos dos juegos que analicé, 'MotoGP 15' y 'F1 2015', y entre ellos tres tienen algunos errores en común. Parece que se pusieron de acuerdo a la hora de realizar ciertos aspectos de los juegos.

Mucho trabajo por hacer

Como en los dos casos que mencionaba con anterioridad, 'Rory Mcllroy PGA Tour' es un juego que parece contar con unas bases solidas de cara al futuro, pero que a la hora de profundizar en el juego que tenemos hoy por hoy en nuestras manos, este se queda realmente corto y transmite un poco la sensación de que este salto generacional ha sido demasiado para él. La poca variedad de modos de juego y la escasez de posibilidades una vez entramos en ellos, es la tónica habitual del título. Como sabiamente dice el refranero español: "vísteme despacio que tengo prisa", y en esta ocasión parece que los chicos de EA han corrido demasiado para volver a salir al mercado (pese al año sabático).

Posiblemente, lo más destacado del juego sea el papel que realiza el propio Rory Mcllroy, que nos hará de cicerone en los primeros momentos de nuestra partida. Mientras el golfista nos motiva como si fuera nuestro coach personal, deberemos ir disputando momentos clave del Abierto de Estados Unidos, para de esa forma hoyo a hoyo alzarnos con el título (o no...). Es un recurso bastante utilizado en este tipo de juegos últimamente, sin irnos muy lejos, recuerdo que al iniciar el 'FIFA 15' por primera vez, disputabas un partido entre Liverpool y Manchester City para conquistar la Premier League. Personalmente, este tipo de inicios me gustan bastante, te dan un plus de emoción e intensidad, y te hace coger con más ganas un juego.

Poca variedad de modos

Pero sin duda alguna el mayor hándicap con el que cuenta 'Rory McIlroy PGA Tour' son sus pocos modos de juego, así como la escasa profundidad de los modos existentes, tanto online como offline, transmitiendo de nuevo la sensación de que al juego le faltaba algo más de trabajo antes de salir al mercado. A mí personalmente, se me hace realmente difícil comparar este título con los últimos de Tiger Woods, pero por lo que he podido ver y comprobar, la perdida va mucho más allá de un determinado modo de juego, si no que se extiende a opciones clave tales como el plantel de golfistas disponibles o la interacción con otros jugadores cuando le damos caña al online.

La sensación que deja el título después de jugar durante unas cuantas horas es de ocasión perdida. Esta sensación se hace palpable en detalles como hacer uso de golfistas ficticios como un soldado de 'Battlefield', en lugar de tener más golfistas de la PGA, golfistas del circuito femenino o leyendas del deporte. Pero lo peor sin ninguna duda viene de la mano del Modo Carrera, aquí sí que la sensación de dejadez se hace notar a grito limpio.

Pocos alicientes para profundizar en el juego

La tristeza empieza apoderándose de uno cuando empieza a ver el editor con cuatro muñecos genéricos para escoger (cada uno más feo que el anterior), pero esto sería el punto menos importante, lo peor llega cuando juegas y ves que no tienes ninguna sensación de progresión ni de crecimiento del personaje, el que debería ser el punto clave del juego. En un juego de golf esto sería realmente sencillo, ya que como pasa en el tenis, las posiciones se basan en un ranking general en el cual a medida que ganas puntos con tus participaciones en los torneos vas mejorando. Sin embargo aquí simplemente haremos un torneo tras otro, no hay ranking, no hay torneos amateur para empezar, no hay nada. La verdad es que personalmente pienso que no hay un motivo de peso para dedicarle tiempo a este modo, más allá de conseguir los trofeos/logros correspondientes (a quien le interese este tema).

Al modo multijugador también le falta un plus de contenido, sobretodo a la hora de fomentar comunidades. Yo principalmente echo de menos una modalidad que te permita reunirte con un grupo de gente para realizar desafíos, torneos, etcétera. Algo parecido a los clubes que tienen varios juegos deportivos como 'DriveClub' , 'Forza Horizon 2' o 'FIFA 15'. Pero lo realmente sorprendente de este aspecto, es ver que en anteriores entregas de la saga sí que estaba disponible esta opción, lo cual te hace dudar de las intenciones de la desarrolladora con este título. Pero bueno, vamos a darles un voto de confianza pensando que simplemente ha sido una cuestión de tiempo y que lo veremos de vuelta en futuras entregas.

Algo de aire fresco

Sin embargo, es curioso que un juego de EA Sports que busca siempre ser un calco fidedigno del deporte en cuestión, donde más destaque (bajo mi humilde opinión) sea en el modo más arcade que tiene, el Night Club Challenge. Se trata de un modo de juego que se aleja del golf tal y como lo conocemos, y que consta de una serie de desafíos que tendremos que ir superando, con portales que llevarán la bola a lugares inesperados, impulsos que le otorgarán una velocidad extra... Yo personalmente lo catalogo como un minigolf dentro de 'Rory Mcllroy PGA Tour', y la verdad es que es un modo perfecto para romper con la monotonía del resto, realmente muy divertido.

Por último, otro dato curioso que no quería pasar por alto, es el hecho de que estamos delante del único juego deportivo desarrollado por EA Sports que no hace gala del motor Ignite como 'FIFA', 'NBA Live' o 'Madden NFL'. En esta ocasión el motor utilizado es el Frostbite 3.0, que si bien el resultado que ofrece en este título es bastante bueno y gratamente sorprendente (a pesar algunos problemillas), es un motor que se ha quedado atrás como hemos podido ver en los últimos juegos de la franquicia 'Battlefield'.

Conclusiones

En definitiva, 'Rory McIlroy PGA Tour' es un juego que saciará las ganas de golf a los fans que se llevaron una decepción al quedarse sin la edición del año pasado, pero que está muy lejos de convertirse en un juego imprescindible. Técnicamente el juego cumple en todas las facetas, pero la falta de objetivos y variedad por ejemplo dentro del Modo Carrera o del multijugador online, hacen que la experiencia de juego resulte terriblemente monótona. Los pocos modos de juego (su talón de Aquiles) con los que cuenta, unido a la sensación de repetitividad, únicamente paliada por los Night Club Challenges, hacen que el juego sea totalmente prescindible para el gran público, ya que seguramente no sea la mejor opción para empezar a dar los primeros pasos en este deporte. Sinceramente pienso que al juego no le hubieran venido mal unos meses extras de desarrollo para acabar de pulirlo y me atrevo a asegurar que este no era el salto de generación que tenían en mente los seguidores de la franquicia.