La serie de AMC 'The Walking Dead', se ha convertido en una de las series más famosas y seguidas de los últimos años. Pese a que últimamente decaída mucho en audiencia, es innegable el gran éxito que ha tenido tiempo atrás. A lo largo de sus ocho temporadas, hemos conocido (y nos hemos encariñado) con infinidad de personajes e historias. Uno de los personajes que conocimos al principio de esta historia es al interpretado por Laurie Holden, Andrea. Este personaje perdió a su hermana al principio de todo y, pese a no caer muy bien a la mayoría de la audiencia, no podemos negar que era una mujer de armas tomar.
No ha visto ni un sólo capítulo
La actriz ha hablado recientemente sobre su paso por la serie y asegura que nunca ha visto, ni tiene intención de hacerlo, verla. Así se lo ha explicado a Express. Laurie no soporta verse en pantalla en este o en un proyecto distinto, algo muy común entre actores: "No lo veo, pero tampoco lo hacía cuando aparecía en ella, así que no es que sea poco respetuoso. No me gusta verme en películas y he llegado a querer tanto a mis compañeros que tampoco quiero verles en pantalla. No quiero ver cómo son torturados. Es muy difícil para mi espíritu. No puedo hacerlo", comenta.
No es un rasgo tan peculiar como parece
Aunque parezca extraño, este peculiar miedo es algo que muchos actores y actrices famosos de Hollywood sufren. Johnny Depp, Angelina Jolie o Robert Pattinson no disfrutan viendo el resultado final de los proyectos en los que han participado. "De alguna manera, una vez que mi trabajo en una película está hecho, realmente no estoy obligado. Me mantengo lo más alejado posible... No me gusta verme a mí mismo", comentaba Johnny Depp, protagonista de la famosa saga de Disney, 'Los Piratas del Caribe'.