Cuidado: esta noticia contiene spoilers del final de 'La maldición de Hill House'.
'La maldición de Hill House' ha llevado el terror a todos los hogares. El último estreno de Netflix se ha convertido en un rotundo éxito, e incluso ha alcanzado una nota sobresaliente en 'Rotten Tomatoes'. Esto sorprende especialmente porque este género no es uno de los más alabados o seguidos por la audiencia, con lo cual tiene un mérito especial.
Mike Flanagan, el director de la serie, ha aprovechado el momento para hablar del final de la serie, que sorprendió notablemente a los espectadores. El hecho de que una serie tan oscura tenga un "final feliz" es, cuanto menos, chocante; hubiera cabido esperar que la desesperanza acabara rompiendo la familia Crain al completo. Pero cuando todos consiguen salir, a excepción del padre que decide quedarse con su esposa, la sorpresa es bastante evidente en el público. Flanagan tenía pensado otro final, uno mucho más deprimente, pero que hubiera encajado bastante bien con el tono de la serie.
La idea del director era que ninguno de los Crain consiguiera abandonar la casa, y que quedaran condenados de por vida a estar allí. Pero sin saberlo, sin ser conscientes de sus cadenas, sino creyendo que habían logrado salir. Para ello, la casa habría usado la habitación roja, que es el estómago del hogar, tal y como dice Nell. Gracias a esta habitación, podría haber proyectado los deseos de todos los inquilinos y hacerles creer que todo había salido bien... Pero no ser más que una mentira.
¿Cómo podrían haberlo hecho? Muy sencillo. En la escena final, cuando se reúnen para celebrar los dos años de sobriedad de Luke, hubiera bastado con situar al final de la habitación una ventana rectangular, la misma que siempre se veía desde la habitación roja. En ese momento, el espectador hubiera sido consciente del engaño... Pero los protagonistas no. "Hablamos durante mucho tiempo sobre poner la ventana de la habitación roja al final, y decidimos no hacerlo. Era demasiado cruel", explicó Flanagan.
¿Era demasiado cruel?
Que una película de terror acabe bien es sorprendente, con lo cual en este sentido 'La maldición de Hill House' ganó puntos. No obstante, la sensación hubiera sido totalmente distinta si se hubieran decidido a hacer un final como el que describe Flanagan. El espectador hubiera guardado un recuerdo más oscuro de la serie, puesto que todo habría acabado mal.
No es un final que pueda considerarse "demasiado cruel" como tal, pero sí es un final que resulta chocante en cierto modo. El quedarse con buen sabor de boca al terminar una serie o película es algo que muchos espectadores agradecen, y quizás los guionistas y el director se decidieron por este final pensando en esa sensación última. ¿Qué hubierais preferido vosotros si os hubieran dejado elegir?