El 20 de July 2016 | 12:36
Desde que se estrenó 'Canción de Hielo y Fuego' nos han dado mucho la lata con eso de que "llega el invierno", pero al final el desenlace de la serie parece que se nos va a ir al verano, pues la séptima temporada de 'Juego de Tronos' confirmaba ayer mismo que nos tendríamos que esperar no solo hasta el próximo verano de 2017 sino que solo nos brindarán siete de los diez capítulos a los que estamos acostumbrados. Quedan trece episodios, la HBO lo tiene ya todo en mente, pero hay algo que me causa escepticismo.
Quitar tres capítulos de una temporada implica quitar de tajo tres horas de la misma, un tercio. Es como si de un pastel haces tres porciones y te comes una antes de que empiece la fiesta. En tres horas suceden cada una de las tres partes del 'Señor de los Anillos', y en la obra de Tolkien ocurrían muchas cosas en esos metrajes. Es una pasada, se mire por donde se mire. Más les vale que esos siete capítulos sean buenos, pues si no podemos estar ante lo que muchos de los más acérrimos a la novela se estaban oliendo desde que con la cuarta temporada se comenzaron a tomar tantas cosas de 'Danza de Dragones', y es que a los guionistas se les empezase a echar encima la responsabilidad de terminar con la historia del trono de hierro antes que el propio R.R. Martin. ¿Le están viendo acaso las orejas al lobo?
La reponsabilidad pesa, y mucho
La producción de la séptima temporada se rodará en Islandia, España e Irlanda del Norte. Vamos a ver mucha nieve, mucha sangre, mucho dolor. Queremos en realidad verlo todo, pero no queremos que suceda lo mismo de las últimas dos temporadas, cuando se ha empezado a echar leña al fuego cuando pasábamos el ecuador de la temporada. No me malinterpretéis, adoro la dirección de 'Juego de Tronos', pero cuenta con altibajos que no han sabido afrotnar bien sea por la densidad de los libros o porque preferían hacer un par de capítulos épicos cuando los otros eran simples ramas que terminaban naciendo de una misma raíz. Los 6x09 y 6x10 son de lo mejor que personalmente he podido ver en una serie de corte fantástico en toda mi vida, pero David Benioff y D. B. Weiss me están danto motivos para creer y para dudar al mismo tiempo.
O lo tienen muy claro o no tienen ni idea de qué hacer
Por un lado tenemos su argumentación de haber querido esperarse a verano porque creen que así funcionará mejor a nivel comercial; mientras que por otro lado esto indica cierta sensación de que van a guardarse toda la carne para los seis episodios restantes de la octava temporada y ofrecernos ahí sí un frenesí de momentos que nos van a impedir dejar de estar con la boca abierta un solo minuto. Mucho cuidado pues, porque si se marcan una serie de verano a modo de "temporada de relleno", de anticipación a algo grande donde en realidad no se esté diciendo nada, a mí me estarían decepcionando enormemente. Doy por hecho que de esos siete capítulos solo dos o tres van a merecerse páginas y párrafos llenos de superlativos explicando por qué somos fans de 'Juego de Tronos', pero también cabe la posibilidad de que sea solamente así el último de ellos, el que tenga en los créditos finales el mensaje de "nos vemos en 2018, pringaos".
Esperemos que por aquel entonces 'Vientos de Invierno' esté ya a la venta y podamos estudiarnos cómo R. R. Martin tenía todo pensado, porque al final esta 'Canción de Hielo y Fuego' se está empezando a parecer más al día antes de los exámenes finales, cuando te crees en ocasiones que lo tienes todo bajo control pero en realidad estás cagado de miedo. HBO se la está jugando.