Aviso: Esta noticia contiene spoilers del 8x01 de 'Juego de Tronos'.
Samwell Tarly es posiblemente el personaje que menos merezca morir de los Siete Reinos, la bondad reencarnada en un mundo cruel y despiadado. En el primer capítulo de la última temporada de 'Juego de Tronos', Sam se ha encontrado con esta crueldad en la cara, cuando Daenerys Targaryen le ha contado que acabó con su padre y su hermano por no hincar la rodilla.
Sam recibe la terrible noticia
"Ahora Sam es perfectamente consciente de que Dany se encuentra en un estado muy desequilibrado, volátil y bastante peligroso. Ha visto con sus propios ojos cómo de fría es con las vidas de otras personas y ahora lo está conectando con sus propias emociones. Ha descubierto lo que está dispuesta a hacer si alguien decide desobedecerla y cómo su camino al poder no conoce de ningún tipo de código moral. [...] Se lo dice de una forma muy clínica, muy fría y muy desapegada. Que no le ofreciera ningún tipo de confort da una sensación de psicopatía. [...] En ese momento ve lo peligrosa que es y es lo que le empuja a contárselo a Jon".
En efecto, Sam finalmente le contó a Jon Nieve la verdad detrás de su verdadera identidad. "Sam no es ese tipo de persona que quiere causar ningún problema a Jon. Quiere que todo le vaya bien. [...] Sam ve los problemas que ella puede suponer no sólo para Jon, sino para los Siete Reinos en general. Y también por la protección de su familia. Sam siempre está pensando en eso. Siempre está pensando en la seguridad de Gilly y el pequeño Sam. [...] Creo que Sam tiene mucho miedo. Está aterrado de Daenerys después de eso. Aterrado de lo que es capaz de hacer y quiere intentar evitarlo".
Dicho sea de paso, ahora que John Bradley ha mencionado a su familia, ha confirmado que ambos se encuentran "a salvo en Invernalia. Les están cuidando bien".