Las series se han convertido en la nueva pandemia de este siglo; dedicamos prácticamente todo nuestro tiempo libre a ver series, incluso más que películas. Seguimos casi todas las que van saliendo, tratamos de mantenernos al día, sufrimos con los protagonistas y disfrutamos con ellos... Lo que para nuestros antepasados eran las novelas por fascículos son para nosotros las series.
No obstante, hay dos formas de consumir series, muy distintas entre ellas y con grandes detractores y defensores ambas: ver la serie semana a semana, cuando se van emitiendo los capítulos, o devorar las temporadas al completo en apenas un día o dos. La elección suele depender mucho de cómo se emitan las series en cuestión, por supuesto; y es que mientras que 'Orange is the New Black' cuelga todos los capítulos el mismo día, 'Juego de Tronos' va lanzando uno cada domingo. En el caso de la primera está claro que es mejor ver la serie más o menos del tirón, espaciando cada uno lo que prefiera entre episodio y episodio; no obstante, en el caso de la segunda... ¿Qué sería lo mejor?
El creador de 'Breaking Bad' y 'Better Call Saul', Vince Gilligan, tiene bastante clara su opinión: "Sé que ahora estoy un poco pasado de moda con esta filosofía, pero creo que el hecho de que los fans se quejen de tener que esperar una semana permite que puedan digerir y reflexionar los conceptos de cualquier episodio". No obstante, también mantiene que cada uno debe decidir lo que es mejor para sí mismo.
Píldoras de emoción o un maratón de horas
Si tenemos en cuenta que las series se dividen en episodios de una duración determinada, cada uno estructurado en sí mismo aunque con una unión a los siguientes, lo lógico sería pensar que lo mejor que se puede hacer es ir viendo cada uno de forma semanal o, al menos, espaciada. No están pensadas para darse un atracón, para ver todos los episodios uno tras otro; ahora bien, cada uno decide cuál es la mejor forma de seguir una serie, por supuesto.
Personalmente, he de admitir que yo me declaro más "tradicional". Cuando una serie me gusta, como 'Juego de Tronos', me gusta ir siguiéndola al día. Ir disfrutando la emoción de la espera, de analizar cada detalle del capítulo para ver si así puedo sacar más jugo. Ver un episodio se convierte en una especie de ceremonia: pasas una semana (o un año, si es el primero de una temporada) esperando, imaginando, elucubrando; una vez que lo ves, lo examinas al detalle, tratas de ver qué es lo que ha pasado, cómo esto puede acabar afectando al resto... Y, tras eso, comienzas a presuponer en tu cabeza qué es lo que pasará a continuación, cómo ese capítulo podrá incidir en el siguiente. De esta forma no solo disfrutas durante los cincuenta minutos que dure el capítulo, sino que también disfrutas elaborando teorías con tus amigos, o buscando en redes sociales y foros.
El ver la serie del tirón tiene también sus cosas buenas, claro. Por ejemplo: si quieres ver el siguiente capítulo no vas a tener que esperar, la impaciencia no va a comerte por completo. Aunque de esta forma también se pierde la ilusión de la espera. Nos hemos vuelto demasiado inmediatos con las nuevas tecnologías, lo queremos todo ahora, y, en ocasiones, es mejor aprender a esperar. Porque toda espera tiene su recompensa.
Cuando vemos una serie al día, suele haber siempre una semana entre episodios. De esta forma, tal y como señala Gilligan, tenemos tiempo para asimilar todo lo que ha sucedido. Es como que necesitamos esos días para poner en orden nuestros pensamientos, para ver el episodio con otros ojos. ¿No os ha pasado eso alguna vez? Por ejemplo, al ver una película: vuestra opinión más inmediata era una, pero al ir pasando el tiempo esta ha ido cambiando. Porque habéis leído críticas diferentes a la vuestra, porque habéis tenido la oportunidad de reflexionar.
Como habréis podido comprobar, yo me declaro firme defensora de ir viendo cada episodio en su momento. Distinto es que haya plataformas que suban una temporada completa de la serie al mismo tiempo; ahí hay poco que elegir, realmente. Puedes ir espaciándote tú los episodios, pero los riesgos de spoilers son demasiado grandes. También hay quien prefiere esperar a que una serie termine por completo para verla; por sorprendente que os parezca, hay quien está haciendo justo eso con 'Juego de Tronos'. Yo sería incapaz, porque, de nuevo, los riesgos de spoilers son demasiado altos... ¡Y porque mi paciencia no da para tanto! ¿Qué preferís vosotros?