La semana pasada se emitió el tercer episodio de 'The Mandalorian' en Disney Plus (mientras en España tenemos que esperar hasta marzo para verlo de forma legal), un ejercicio de western moderno (con influencias del 'Yojimbo' de Kurosawa y de 'Hervidero' de Woo, según la propia directora) que estaba dirigido por Deborah Chow, la primera mujer en dirigir una obra en acción real del universo Star Wars. Esta implicación de Chow no se quedará en anécdota, sino que su colaboración continuará haciéndose cargo de la esperado serie de Obi-Wan Kenobi, protagonizada por, una vez más, Ewan McGregor. Después de no conseguir el éxito esperado con los spin-offs de 'Star Wars', hizo que el proyecto se convirtiera en una serie, algo que la propia Chow ha explicado que es lo más conveniente.
"La situación [de Obi-Wan] es tan compleja tanto personalmente y, en cierto modo, el estado de galaxia, que necesitas tiempo para explorarlo", explicó Chow en una entrevista reciente con el New York Times. "La verdad es que hay un montón de otras historias dentro de ese periodo de tiempo, son unos cuantos años. Ocurren muchas cosas en medio [de 'La venganza de los sith' y 'Una nueva esperanza'] que todavía no se han explorado. La idea de poder embarcarme en este viaje del personaje, además de la parte política y la vastedad del Imperio y todo lo que está sucediendo, es emocionante porque da la sensación de que es un periodo de la historia real y a veces es difícil hacerlo en dos horas".
Aprendiendo de los mejores
Participar en 'The Mandalorian' le ha servido a Chow para ganar experiencia para afrontar la serie de Obi-Wan. "Uno de los mayores beneficios es que he pasado el último año metida en el universo Star Wars y he tenido unos gran mentores, que son Jon [Favreau] y Dave [Filoni]", reconoce la directora.