Google lleva modificando las condiciones y términos de uso de YouTube desde hace bastante tiempo y ya se encargó de eliminar contenidos relacionados con la compra, venta o modificación de armas, pero ahora ha vuelto a acotar el cerco y ha decidido prohibir cualquier vídeo cuyo tema principal sea la piratería (hacking) o el fraude informático (phising). Las primeras quejas ya han aparecido, ya que el algoritmo no distingue aquellos vídeos que promueven estas actividades de aquellos que enseñas a cómo protegerse.
A aprender a otra parte
Desde casi su concepción, YouTube se convirtió en un lugar donde los usuarios subían todo tipo de contenido con el fin de enseñar algo a los demás, pero literalmente. Es decir, a día de hoy la base de datos de la plataforma contiene todo tipo de tutoriales que son como vía de escape para aprender ciertas herramientas que pueden servir para un momento muy puntual, aunque no todas las actividades sean las más legítimas del mundo. Y aquí es donde entra la nueva política de YouTube, ya que no quiere ni hackers ni estafadores en su casa.
Google ha vuelto a actualizar las normas de YouTube y ha decidido no dar cobijo a material que esté relacionado con la piratería o el fraude informático. Si quieres aprender a modificar una máquina o a saltarte la seguridad de un software, YouTube no va a ser tu escuela nunca más. La decisión tomada por la compañía tiene, además, carácter retroactivo, es decir, se está aplicando a todos los vídeos y canales que ya estaban publicados y se está procediendo a su eliminación total.
El problema que se ha encontrado la plataforma es que el algoritmo que ha creado no distingue el contenido que busca educar para "atacar" del que enseña a "proteger", por lo que YouTube ya ha recibido bastantes reclamaciones de usuarios cuyos vídeos solo buscaban enseñar técnicas para no caer en fraudes.