El 3 de Mayo 2018 | 13:05
Era algo que todos sabíamos que iba a ocurrir más pronto que tarde. Después de destaparse el escándalo sobre la compraventa de datos privados alojados en Facebook por parte de Cambridge Analytica el futuro para las dos empresas se presentaba con nubarrones muy oscuros. Mark Zuckerberg ha podido esquivar algunos de ellos asegurando que se han reforzado elementos de privacidad en su red principal y en las periféricas, pero la instigadora de toda la trama, la empresa que accedió a los datos, no ha podido esquivar su negro futuro y anuncia el cese de operaciones a la vez que se declara en bancarrota.
Varios casos seguidos
Aunque el escándalo de Facebook y la compra de 87 millones de datos privados, generalmente de estadounidenses, ha sido su trama más mediática, la compañía está envuelta en otros litigios que afectan a sus más altas esferas, pues el propio presidente de la misma, ahora suspendido, fue grabado por una cadena de televisión mientras ofrecía a clientes potenciales de la empresa tácticas para obtener el favor de la clase política a través del sexo y todo lo que ello conlleva. Alexander Nix, el presidente de Cambridge Analytica, ya estaba involucrado en este hecho cuando el público conoció los entresijos de los datos ocurridos en Facebook.
Enfrentarse a todos los procesos judiciales que ahora mantiene abiertos ha hecho que los responsables de la compañía envíen un comunicado a todos sus trabajadores en el que se pide que devuelvan, a la mayor rapidez posible, todos los ordenadores de la compañía con datos sensibles, así como un cierra total de sus distintas sucursales, lo que también incluye al grupo SCL, la filial británica de la empresa, que también ha cerrado puertas en todas sus delegaciones a lo largo del país mientras sus empleados eran despedidos.
Precisamente los datos obtenidos de Facebook, financiados por el republicano Robert Mercer, habrían sido usados para interferir en el proceso del Brexit que está llevando a cabo Reino Unido y en la campaña presidencial de Estados Unidos para favorecer a Donald Trump, que ya cuenta con varios frentes abiertos en cuanto a irregularidades en su ascenso hasta el despacho oval de la casa blanca.
En paralelo a este cese del negocio, la compañía ha anunciado su bancarrota, lo que deja a sus usuarios y afectados en una complicada situación, aunque habrá que ver qué decisiones se toman en las próximas semanas en las distintas instancias estadounidenses, que ya solicitaron la presencia de Mark Zuckerberg en el congreso de Estados Unidos y que podrían solicitar la presencia del propio Alexander Nix para que sea él mismo de viva voz el que explique todo lo ocurrido en estos últimos años con una de las empresas más conocidas dentro de su sector.