El 28 de Abril 2015 | 10:18
A parte de explorar, 'Xenoblade Chronicles 3D' es un mundo lleno de peligros donde el combate es algo que estará a la orden del día.
Se trata de combates en tiempo real, con habilidades que se recargarán cada cierto tiempo, dependiendo del nivel de habilidad que tengamos y el personaje.
Pero que no te engañe. No todo es un machaca botones porque hay mucha estrategia en este sistema, desde la posición en el combate, hasta el orden en el que realizamos los ataques. Échale un ojo a esto si quieres librarte de tus enemigos cuanto antes.
Potencia las habilidades clave
El sistema de juego nos va a permitir controlar a uno de los personajes en combate, mientras que a los otros podremos darles órdenes generales. Pero lo que sí podremos hacer es determinar qué habilidades queremos que usen en los combates y cuáles vamos a potenciar.
No esperéis encontrar muchos personajes curativos, ya que únicamente Sharla tendrá tendencia a ser llamada "curandera". Otros personajes tendrán alguna que otra habilidad curativa, pero no muy potente por lo que será mejor que te dediques a potenciar estas habilidades, sobre todo, si decides sacar a Sharla del grupo de combate.
También es recomendable pensar mucho en los combos y cadenas, que será la única forma de derribar o imponer estado alterados a grandes jefes o enemigos poderosos. Coloca siempre habilidades que desprotejan y derriben al enemigo en personajes distintos, o que sean capaces de envenenar y posteriormente hacer un ataque sobre venenos más potente.
La estrategia es muy importante en 'Xenoblade Chronicles 3D' porque vas a encontrar a muchos enemigos que son inmunes a muchos combos.
Potencia a Monado
Pero si hay un tipo de habilidad que es importante en el juego es, sobre todo, Monado. La espada de Shulk irá aprendiendo, por historia, nuevos ataques y nuevas habilidades. Hay una, en concreto, muy útil, ya que solamente Monado es capaz de hacerle daño a los Mekon. Cualquier otro arma solo le hará un punto de daño, a menos que hayamos derribado al enemigo.
Esta habilidad de la que os hablo nos permite encantar a los aliados y conseguir que ellos también le hagan daño. Cuanto más la tengamos potenciada, más daño extra conseguiremos y más tiempo durará el enfrentamiento, así que, no le quitéis ojo de encima.
También hay otras, como la barrera, que evitará que los enemigos nos golpeen con su ataque especial más potente, pero solo si su nivel de ataque es inferior al de nuestra barrera. También veremos velocidad, suerte, destreza, y largo etcétera, que también os recomiendo que potenciéis, pero dependiendo de vuestra estrategia.
Sitúate bien en combate
No todas, pero sí muchas de las habilidades que usaremos en combate, se potencian dependiendo de cómo las hagamos y, sobre todo, desde dónde las hagamos.
Leed bien las descripciones e intentad situaros en ese flanco del enemigo que más daño os va a permitir hacer y, sobre todo, infligir estados alterados que, de otra forma, no sería posible.
Pero no solo durante el combate, si antes de comenzar uno ya estás bien situado y pillas al enemigo por sorpresa, te alegrará ver que, muchas veces, y si es de tu nivel, empezarás con el combate medio ganado, del tirón.
Haz muchas cadenas
SI hay algo que te puede salvar el culo en combates muy chungos son las cadenas. Estos movimientos nos permiten utilizar contra un enemigo un arte o habilidad de cada personaje implicado en dicha cadena, desde dos ataques mínimo, hasta un máximo que determina la afinidad (a más afinidad ente personajes, más ataques) y nuestra habilidad.
Esta es la única forma de infligir estados alterados a los jefes, por ejemplo, como derribo (previa desprotección), desangrado, aturdimiento, etc, pero no solamente eso. También podremos usar las artes de protección y curativas independientemente de si están disponibles o no, ya que, cuando hay una cadena, todas las artes se recuperan.
Esto nos puede curar a todo el equipo, hacer que tengamos más potenciadores o, si nos falta poco, hacerle más daño al jefe en cuestión. Además, también nos sube la afinidad entre los miembros del grupo, por lo que es una buena forma de mejorar ambas cosas.