El 21 de Marzo 2019 | 16:30
El medio del videojuego cambia a pasos agigantados. Un medio especialmente joven que sufre cambios a cada año. Y es que lo que hoy consideramos actual, quizás no lo sea mañana. Incluso la etiqueta 'retro' empieza a convertirse en una taxonomía demasiado ancha en esta época en la que ya encontramos remasterizaciones dobles y ports múltiples para lidiar con la ausencia de lo que consideramos grandes clásicos.
Así Google presentaba ayer lo que ya consideramos como la evolución futura del videojuego. Una presentación que nos ofrecían desde la GDC en San Francisco y con la que piensan revolucionar todo lo que conocemos hasta ahora. Stadia es una realidad pero, ¿funciona realmente o sigue siendo un sueño inalcanzable?
Un paso hacia el futuro
Que Google presentara un modelo de videojuegos por streaming no nos ha cogido por sorpresa. Lleva meses pululando entre titulares y rumores. Sin embargo, si que han planteado un panorama sorprendente. Mucho más favorecedor de lo que podríamos haber imaginado en una primera instancia. Así es. Porque Google viene con la idea de cambiar el futuro del videojuego. No es un presente. No es hoy ni mañana. Pero si podría ser el futuro.
Y es que es Google quien tiene el presupuesto necesario para establecer una red capaz de soportar lo que ofrece. Pero no solo eso. Porque la empresa tiene también el potencial, el cerebro para llevarlo a cabo y una enorme experiencia en la nube. Incluso más allá de eso. Stadia será una realidad en pleno 2019, convirtiéndose, posiblemente, en su mayor apuesta.
Máxima calidad a un click de distancia
La mayor promesa de Stadia es su capacidad para reproducir sus obras a calidad 4K y 60 fotogramas por segundo a través de su servicio de streaming. Sin esperas, sin cargas, un click y listo. «Instalar juegos será cosa del pasado», afirmaba un orgulloso Phil Harrison sobre el escenario mientras hablaba de las proezas de un servicio que pretende cambiar todos los modelos actuales.
Así sus creadores pretenden acabar con las esperas. Unas que se han impuesto sobre una nueva generación en la que imperan las pausas. Las descargas, los parches del día uno, instalaciones... Todos estos problemas desaparecen con la propuesta del gigante tecnológico a través de una logística que aún cuesta creer como real pero que, siguiendo las pautas que ellos mismos han marcado, acabarían con cualquier tipo de proceso intermedio.
Así lo mostraban en su presentación, cuando tras reproducir el tráiler de 'Assassin's Creed Odyssey' con un solo click accedían al juego como tal. De nuevo, sin esperas, a un segundo de distancia. Esta sería la máxima de Stadia, acabar con cualquier factor disruptor a la hora de jugar y ofrecernos un servicio tan instantáneo como potente.
Donde quieras y como quieras
Siguiendo esa máxima, la gente de Google ha adoptado la mítica cita de Ronald Reagan a Mijaíl Gorbachov, derribando cualquier muro que se sitúe entre sus ideas y la recepción de nosotros, como jugadores y jugadoras. Porque Stadia no necesitará de ningún tipo de hardware para poder funcionar. Se acabaron las consolas, el espacio, el coste. Así sería la propia Google quien pondría de su parte toda la maquinaria para hacer funcionar un sistema que es más real de lo que puede parecer en primera instancia.
Por supuesto, además de la tarifa que fije la empresa, necesitaremos un dispositivo donde reproducir lo que ofrece. Algo con lo que la compañía ha paliado fácilmente. Y es que simplemente necesitaremos conexión a Internet para ello. Siguiendo con el multitudinario concepto de Nintendo Switch, Stadia contará con la posibilidad de funcionar aquí y allí. En tu ordenador, tu móvil, tu tablet o tu tele.
Donde quieras y como quieras. Esa es la premisa con la que juega Google apostando por una portabilidad que va más allá de lo soñado y no nos encadena al hardware de una empresa sino que nos permite disfrutar de aquello a lo que queramos jugar en nuestros propios dispositivos. Sin necesidad de contar con la última tarjeta gráfica del mercado, toda la memoria RAM posible o la tecnología gaming más puntera en nuestro smartphone.
Ocurre lo mismo con el mando. Porque sí, el servicio contará con su propio dispositivo. Pero Google nos deja ir preparados de casa. Y es que podremos conectar cualquier mando —siempre y cuando sea soportado por el dispositivo donde lo usemos— para disfrutar del contenido que ofrece este nuevo servicio.