El 25 de Abril 2017 | 13:47
El antes y el después de la televisión
Pero 'Twin Peaks' fue una de las primeras series dirigida con el estilo cinematográfico, lo que convirtió a su público en conejillo de indias. Este no sabía a lo que se enfrentaba cada semana al ponerse delante del televisor.
Visualmente, ver 'Twin Peaks' es como ver una película, planos y fotografía muy cuidados y una estética propia, lo que ayudaba a reconocerla en solo una escena. Por no hablar de la banda sonora, del gran Angelo Badalamenti, reconocible con solo una nota.
Todo estaba expresamente cuidado para que el espectador experimentase, incluso desde los títulos de crédito, la imagen idílica del pueblo, en apariencia, con la cara oculta de sus oscuros habitantes.
Tenemos que valorar la valentía de Frost y Lynch, ya que gracias a la aparición de esta serie hemos podido disfrutar de otros productos tan complejos como 'Perdidos', 'The Leftovers' o 'Westworld'. Series complejas y atípicas, que no tienen miedo a experimentar y que no están hechas para un espectador pasivo y sentimental. Los que vieron 'Twin Peaks' fueron testigos de una nueva forma de pensar y ver las series.
Lynch nos ha dado 25 años para asimilar todo lo que su serie nos quería mostrar. Ahora, con el auge de las series de culto, el director nos pide una segunda oportunidad, que llegará el 21 de mayo y que, con una mentalidad nueva, acogeremos con los ojos abiertos.