Por Marco Gonzálvez
El 31 de Julio 2017 | 12:21
Sabiendo que el E3 es la feria del videojuego por excelencia a nivel global y que el Tokyo Game Show es la venta a occidente del hermético mercado japonés, la pregunta es evidente ¿Qué función cumple Gamescom? ¿Se límite únicamente a ser la excusa de Europa para mostrarse relevantes en el medio? Pues en esencia sí, obviamente Europa es un pedazo muy grande de las ventas mundiales de videojuegos y la necesidad de tener su propia feria de gran tamaño es casi obligatoria, ahora bien ¿no apuntamos demasiado bajo?
Bien sabemos que Gamescom no es un escaparate para venderle al público nada como si lo es la feria angelina, pero desde luego se torna escasa y casi aburrida la conocida hoja de ruta de exponer unas cuantas demos, ofrecer algunas entrevistas guionizadas que rara vez aportan algo al jugador o al profesional y contados anuncios de pequeño calado.
Me resulta especialmente difícil ver el atractivo en esta feria sin haber podido asistir en persona a la misma y quizás de hacerlo mi punto de vista cambiaría, pero sin duda desde la distancia la considero la más irrelevante de las grandes e incluso me resulta mucho más interesante como representante europeo la Eurogamer Expo o EGX de Reino Unido.
Dicho esto, no perderé detalle de cada paso que se de en esta feria que dará comienzo el 22 de agosto para profesionales y medios y el 23 de agosto para el público.