El 23 de Agosto 2016 | 16:31
Hace algún tiempo dejé algunas líneas en Zonared acerca del racismo y cómo su manifestación ha ido fluctuando a lo largo de las diferentes épocas y contextos sociales. Se da una cierta ilusión de ausencia de racismo en el momento actual, fundada en el hecho de que las manifestaciones públicas son menos explícitas. Sin embargo, los académicos aseguran que la actitud racista está muy lejos de desaparecer, camuflada en comportamientos socialmente aceptados.
Con los ejemplos de racismo en el fandom de cine, comics, videojuegos y series, tenemos una muestra atómica de este intento de sutileza sujeto sobre pobres racionalizaciones, que esconden, con claridad, actitudes indiscutiblemente racistas. Casos que ejemplifican de manera muy clara las teorías sobre el racismo sutil que hoy día ocupan las páginas de manuales de psicología social.
La expresión racista
Me apasiona, desde siempre, el estudio de las actitudes racistas, pero hoy, para dar contexto a este tipo de actitudes manifestadas en torno a la comunidad de cine y series no quiero acudir a textos académicos, sino que me voy a la cuenta de Twitter de Samuel Aneiros, que de vez en cuando se deja caer por Zonared. Samuel, el pasado viernes, con el caso de la Mary Jane de Zendaya (Spider-Man Homecoming) lanzaba una chispa de lucidez en menos de 140 caracteres para resumir con precisión el caso de racismo que nos ocupa:
Si no sintiera que es una cuestión de racismo entendería las críticas cuando a un personaje se le cambia la etnia.
— Monroe Me Fingies (@XDC_Monroe) 19 de agosto de 2016