El 16 de Octubre 2016 | 22:31
Retomando el comienzo del apartado de la vista, nos encontraremos con que queda un 20% para los otros sentidos. Aunque esta cantidad puede resultar pequeña o insignificante en comparación con el porcentaje de la vista, la verdad es que resulta determinante, puesto que incluye el único sentido sin el que no podríamos vivir: el tacto.
Aún queda mucho por descubrir
El tacto es el único de los cinco sentidos que nos mantiene en constante contacto con la realidad que nos rodea. Supone una herramienta muy útil desde temprana edad, puesto que, a través de él, comenzamos a conocer el mundo que nos rodea, tocando y palpando. Siguiendo esta filosofía, no resulta descabellado observar como algunas empresas están creando sus propios dispositivos para acompañar a las gafas virtuales. Un ejemplo de ello es la empresa española Neurodigital Technologies con su Glove One, un guante de control que permite interactuar, con nuestra propia mano, con un entorno de realidad virtual. Nos permitirá sentir el tacto de diferentes superficies e incluso sentir el peso de un objeto ligero. Otro ejemplo podemos encontrarlo en PowerClaw, aunque, a diferencia del anterior, este solo nos permitirá experimentar sensaciones como el calor, el frío o la rugosidad.
Como podéis ver, hablamos mayormente en futuro porque estos dispositivos se encuentran aún en pleno desarrollo, pero que, en el momento que estén a disposición para su compra, supondrán toda una experiencia añadida a un HMD (casco de realidad virtual). ¿Os imagináis poder sentir el peso de un arma al empuñarla o la fuerza del viento?