El 8 de Abril 2017 | 12:20
Después de esta breve introducción, comenzamos a comparar que nos ofrecen tanto Project Scorpio como PS4 Pro, y la primera parada la vamos a hacer en uno de los aspectos que más ha dado que hablar en los rumores previos, la CPU.
CPU
Desde hace bastante tiempo, se venía especulando con la posibilidad que Microsoft optara por montar en Project Scorpio la nueva CPU de AMD, conocida con el nombre de Ryzen. Por suerte o por desgracia, finalmente esta nueva Xbox no hará uso de lo nuevo de AMD, una noticia que seguramente habrá decepcionada a algunos jugadores, pero que posiblemente haya sido un movimiento muy acertado por parte de Microsoft para evitar un incremento del precio base de su nueva consola.
Finalmente, todo hace indicar que Project Scorpio montará de nuevo la CPU Jaguar. Pero ojo, aquí debemos aclarar dos cosas. La primera de ellas es que Microsoft ha explicado que no se trata de una CPU estándar distribuida por AMD, sino que estamos delante de un producto totalmente customizada para las necesidades de esta nueva plataforma. El segundo detalle es que oficialmente ni Microsoft, ni Digital Foundry, confirman que utilizará Jaguar, simplemente es una suposición, eso sí, tremendamente lógica.
Lo que sabemos cien por cien seguro, es que utilizará una CPU customizada de ocho núcleos x86, con una velocidad de reloj de 2,3 GHz. Por su parte, PS4 Pro sí que monta un Jaguar de ocho núcleos que funciona a 2,1 GHz. Esto supone que la frecuencia de trabajo de la nueva Xbox respecto a su competidora directa es entre un 8 y 9% superior. Este dato mirado fieramente puede no sorprender mucho, pero si lo comparamos con la Xbox One original que monta Jaguar a 1,75 GHz, nos encontramos con un incremento del 31%. Aun así, el gran acierto que ha tenido Microsoft es la de liberar a nueva consola de tareas absurdas que coman recursos, además que los juegos en la actualidad comen muchísimo de la gráfica.
Pero la gran evolución de la CPU viene gracias al uso del Direct3D 12 en el command processor, ya que esto permite reducir muy drásticamente la carga de renderizado de la CPU, liberando muchos recursos del procesador. Para que os hagáis una idea del cambio, aseguran que acciones que suponían anteriormente miles de instrucciones, han conseguido que funcionen en Project Scorpio en apenas once., un cambio drástico, ¿verdad?
GPU
El chip gráfico, procesador gráfico, tarjeta gráfica o GPU, como prefiráis, es otro de los cambios más importantes y relevantes que presenta Project Scorpio. Este es un elemento clave para todas las videoconsolas, y es que se trata del elemento que se encargará de descargar de trabajo al procesador central al ejecutar un videojuego (por ejemplo, esta se encarga de procesar todo lo relacionado con los gráficos).
En este caso, la nueva GPU de Xbox Scorpio estará basada en Polaris (aunque también es un modelo personalizado), y ofrecerá un rendimiento conjunto de CPU + GPU de 6 TFLOPS, confirmándose los datos adelantados en el E3 2016, convirtiéndose en la consola con mejores prestaciones, superando a PS4 Pro que actualmente alcanza los 4,2 TFLOPS. Esto significa que, teóricamente, el rendimiento de estos dos elementos en la consola de Microsoft sería un 30% superior a la PlayStation más potente de la actualidad.
Este procesador gráfico que monta Scorpio, contaría con 40 compute units que funcionan a una frecuencia de 1172 MHz. Aquí de nuevo volvemos a ver que el hardware de Microsoft va un paso por delante de PS4 Pro, que cuenta con 36 compute units con una frecuencia de 911 MHz. Precisamente, la velocidad de reloj de la GPU es realmente un punto muy destacable de Project Scorpio, y supone una buena diferencia con su competidora, ya que en se habla de un incremento de alrededor del 40% respecto a la máquina de Sony.
Si comparamos estos datos con las tarjetas gráficas comerciales, los expertos no acaban de ponerse de acuerdo en donde situarían la GPU de Scorpio, pero estaría entre una AMD RX 470 y la 480.
No obstante, todo esto tiene un aspecto negativo muy relevante, la energía disipada en forma de calor, algo con lo que desde Redmond tuvieron que mediar en la época de Xbox 360. En este caso Microsoft ha apostado en Proejct Scorpio por un nuevo sistema de refrigeración, una capsula de vapor y un ventilador centrífugo que se encargad de disipar el calor, un sistema similar al que vemos en las últimas tarjetas gráficas de Nvidia 1080. Por su parte, PS4 Pro apuesta por un sistema más convencional.