El 14 de Junio 2015 | 10:16
Raúl Manero: un antes y un después
Cuando uno habla de un juego como 'The Last of Us' lo primero que debe hacer es ponerse de pie, ya que nos encontramos delante de un juego que marca un antes y un después en la vida de PlayStation 3, incluso en toda la generación anterior. Sin ningún ápice de duda estamos ante el juego de PS3 en mayúsculas, el título que todo usuario de la consola de Sony debe jugar y dejarse atrapar por su mundo, su historia, sus personajes... Naughty Dog demostró de lo que era capaz y nos regalo una joya atemporal cuando parecía que la generación estaba dando sus últimos coletazos de vida.
A título personal 'The Last of Us' supuso un punto de inflexión en mi vida como jugador, fue mi regalo de cumpleaños en un momento personal en el cual los videojuegos habían empezado a saturarme en exceso. 'The Last of Us' me recordó todo lo bueno de este mundillo, y me hizo recobrar, en gran parte, esas ganas por sentarme un rato a jugar delante del televisor. La historia de Joel y Ellie me atrapo desde el primer momento, manteniéndome enganchado al mando durante semanas, gracias a en gran medida a lo bien desarrollados que están ambos personajes. Nos encontramos delante de dos personajes humanos, vivos, los cuales evolucionan con la historia haciendo que el jugador empatice con ellos.
Además el juego logra mantenerse fresco y sorprender al jugador en todo momento, con giros de guión inesperados que sorprenden a propios y extraños.A lo redondo del guión se le suma el excelso apartado gráfico del título, siendo por aquel entonces el juego que mejor aprovechaba las especificaciones técnicas de PS3 e incluso para mí a día de hoy no hay un título que lo supere.
En definitiva, 'The Last of Us' es un juego obligatorio para todos los amantes de los videojuegos, una joya de la que se seguirá hablando aunque pasen los años. Eso mismo Además no hay excusas para no jugarlo ya que también cuenta con una versión remasterizada para PS4, para todos aquellos que no pudieron disfrutar de él en su día. Solamente me queda por decir, gracias Naughty Dog, gracias Sony y muchas felicidades a Joel y Ellie por su segundo cumpleaños.
Xose Llosa: el valor del riesgo
En la industria de los triple A y las inversiones millonarias el riesgo siempre, absolutamente en todas y cada una de las ocasiones, es algo a valorar. Naughty Dog tenía el camino fácil con un cuarto Uncharted numerado en PlayStation 3, y esperar a PlayStation 4 para con el cambio de ciclo, cambiar también de licencia. Sin embargo, decidieron romper con lo predecible y lanzarse con una IP totalmente nueva, en un género totalmente nuevo para lo que el estudio acostumbraba hasta aquel entonces.
Sin embargo, el riesgo no se redujo meramente a aportar un nuevo nombre al catálogo, sino que se lanzan a la piscina con un juego que rema en una dirección muy diferente a la de 'Uncharted'. Si bien las aventuras de Drake son aptas para todo tipo de jugadores, desde el más avezado hasta el más experto, con 'The Last of Us' ponen sobre la mesa una aventura desafiante y larga. Al final el riesgo vinculado al temor al batacazo cuando se hace algo completamente nuevo, queda sepultado por la más clara genialidad y 'The Last of Us' se convierte en uno de esos juegos que marcan época. Ojalá todos fuese igual de arriesgados que Naughty Dog, y ojalá todos los que se arriesgan diesen en conclusión un resultado semejante a este.
Sergio Carlos González: la culminación de un talento
Naughty Dog ha ido fraguando a lo largo de la última década una idea, una forma de trabajar, un enfoque único para entender el mundo del videojuego. 'Uncharted' fue el primer salto, que no el primer paso; una trilogía magnífica que es para muchos una de las mejores propiedades intelectuales de la pasada generación. Otro gran sector, sin embargo, piensa que fue 'The Last of Us' la cima de un equipo humano capaz de superarse a sí mismo con cada nuevo proyecto.
'The Last of Us' es género en sí mismo. No es perfecto, pero corrige algunas de las flaquezas de las que había pecado el estudio californiano. Estamos ante una pericia ardua, intensa, llena de sentimiento. No hizo falta apostar por una experiencia totalmente cinematográfica para sentirnos frente a la gran pantalla.
Este título es también un riesgo, una obra que bien podría ser autoconclusiva y que pasará a los anales de la historia de esta industria como una piedra inquebrantable del buen hacer, uno de esos que hacen avanzar al videojuego como elemento no solo de entretenimiento sino cultural. Un juego respetado, con un mérito tremendo sabiendo lo que se venía encima meses más tarde. La culminación de un talento, un diamante en bruto que, estoy seguro, tiene mucho todavía por demostrar.
Oriol Vall-Llovera: la cumbre de la madurez
Hablar de Naughty Dog es hablar de madurez precoz; de aquel alumno avanzado a su edad, capaz de sorprender no solo a sus compañeros y profesores sino incluso a sí mismo, gracias a una constante superación día a día. Esta compañía californiana, nos ha estado ofreciendo experiencias únicas y especiales, pero sobre todo consistentes, completas y profundamente trabajadas.
Desde la primera PlayStation hasta la tercera, la premisa fue clara: crear una trilogía para cada una de ellas: 'Crash Bandicoot' en PSone, la revolucionaria 'Jak and Daxter' en PlayStation 2, y la espectacular 'Uncharted' en PlayStation 3. Y claro, visto lo visto, lo previsible era que la nueva IP llegara en PlayStation 4, pero como no han dejado nunca de sorprendernos dijeron, ¿por qué no explotar al máximo el hardware de la consola que más conocemos? Y así nació 'The Last of Us' para PlayStation 3, la última gran maravilla de Naughty Dog, y un juego que alcanza sin duda la cumbre de la madurez de la que siempre ha hecho gala la compañía.
Una historia más adulta y madura si cabe que la de 'Uncharted', unos gráficos que van más alla de aprovechar todas las capacidades de la consola (punteros en animaciones, diseño artístico, expresiones faciales, juego de luces...), y sobre todo una ambientación única, entre los mejores videojuegos y las producciones cinematográficas más carismáticas. Añadidle a esto la jugabilidad más depurada de un juego de la compañía (es mucho decir), un argumento inolvidable y capaz de sumergir a cualquier tipo de usuario sin remedio, y una dificultad ajustada de manera casi perfecta, y tenemos uno de los juegos más pulidos, completos y especiales no solo de toda la generación, sino incluso de la historia de los videojuegos. A veces no todo lo que reluce es oro, pero cuando lo es, sería absurdo negarlo. Da igual si no te gusta el género, la ciencia ficción o los juegos anteriores de Naughty Dog, pues 'The Last of Us' es un juego único en su espécie, que ha marcado época y que cualquier jugón que se precie debería probar al menos una vez en la vida.
Álex Llorca: más que un videojuego
TLOU es, para mí, una obra maestra de los videojuegos. Un título adulto, violento, mascado, imperfecto, novedoso, fresco, que trata al jugador de tú a tú, te mira a los ojos y se sincera contigo: vas a sufrir, vas a reír, vas a querer correr, vas a pensar que soy un cabrón, pero también vas a quedarte vacío y vas a quererme por mis fallos y mis bondades. Y lo más importante, no te voy a dejar indiferente.
Para conseguir todo lo explicado arriba, Naughty Dog ha desprendido talento por los cuatro costados, pero también hay que ir un poco más allá y saber ver que TLOU bebe de otras obras que han aportado esa inspiración, en ocasiones, necesaria. Deberíais echarle un ojo a la magistral película 'Hijos de los Hombres' del señor Alfonso Cuarón y os sorprenderéis con la multitud de similitudes para con el juego. O sería injusto no darle mérito a la adaptación cinematográfica de la novela 'The Road' o, incluso, a 'No es país para viejos', ambas obras escritas por el escritor estadounidense Cormac McCarthy.
Todo lo que rodea a TLOU es una clara obsesión por el detalle, es más que un videojuego, es un cúmulo de diferentes trozos de pastel que juntos han creado una obra que, por suerte para nosotros, ha terminado en una consola. Pero perfectamente esto podría haber terminado en los cines o incluso en una representación teatral. Oh, vaya, creo que esto último ya se ha hecho realidad... pinchad aquí y veréis por qué digo que esto no es un mero videojuego, es una obra cultural tangible y muy humana.
Nota: Si no has jugado 'The Last of Us' no avances en las dos siguientes páginas del reportaje, ya que se narran hechos importantes de todo el juego.