Las peores adaptaciones cinematográficas de Stephen King

Continuamos fuerte. IT es una de las películas más famosas basadas en un libro de Stephen King, que también consiguió ser muy famoso. Hay quien suele criticar las novelas largas de King, aduciendo que alarga demasiado las tramas, llegando a hacerlas pesadas; quien haya defendido eso alguna vez, es porque no ha leído IT (aunque puede que sí haya leído La Tienda. En ese caso, le doy totalmente la razón).

La película se estrenó en 1990, fue dirigida por Tommy Lee Wallace, que también se encargó del guión junto con Lawrence D. Cohen. En principio, fue vendida como una miniserie pero, posteriormente, se editó como si fuera una película. Cuenta la historia de un pequeño pueblo de Maine, en Estados Unidos, donde una fuerza malvada está aterrorizando a todos los habitantes del pueblo, especialmente a los más pequeños. Poco se sabe de esa entidad, aparte de que suele llevar máscara de payaso y adora perseguir a los niños, haciéndose pasar por sus terrores más básicos. En sus 192 minutos de montaje, la película aporta terror y misterio a partes iguales. ¿Cuál es el problema, entonces? Hasta ahora, ninguno. La película es una auténtica maravilla, pero no es la mejor adaptación que se pueda hacer de la novela de Stephen King.

Quizás, por la premura del cine, se pierden detalles fundamentales de la historia. Hay partes muy importantes de la novela que en la película quedan en el olvido; sí, como en la mayoría de las adaptaciones, diréis. Pero esto hubiera tenido fácil solución: podrían haber seguido la estructura del libro, y dividir la película. En lugar de hacer una, puede que debieran haber hecho tres. Ya en su momento fue dividida en dos, puesto que fue emitida como una miniserie en televisión, pero, pese a esto, aún hay datos que se pierden por el camino. La historia completa es tan sencillamente maravillosa que la película podría haber dado mucho más de sí. A ver si los encargados de hacer el remake (que llegará este año a los cines) se aplican un poco el cuento, y son capaces de transmitir todo lo que el libro ya contó en su momento.