El 24 de Agosto 2015 | 19:48
1) 'It' (1990)
Coulrofobia, así se ha dado en llamar el terror irracional a los payasos. Los bufones deberían sacar una sonrisa a los niños, pero de manera instintiva se han convertido en uno de los miedos más arraigados de la población occidental. Si pienso en el payaso más emblemático de la cultura popular tengo que echar la vista a It (Eso), la novela río de Stephen King que se alzó como una de las tv movies más importantes de la historia de la mano del director Tommy Lee Wallace. Ahora 'It' tiene en camino un ¿remake? para cines, que lo tiene difícil para desbancar el hito en el que se ha convertido la película televisiva original. En este producto un payaso llamado Pennywise aterroriza a una pandilla de amigos desde niños hasta ocupar sus pesadillas en edad adulta. En 'Until Dawn', ya lo hemos visto, también habrá una suerte de payaso (también se parece a Jason Voorhees) de rigor.
2) 'The Evil Dead' (La original) (1981)
'Posesión Infernal' lo tiene todo para convertirse en emblema del género: Una producción sacada adelante con una suma de dinero ridícula para el cine estadounidense, una pandilla de jóvenes calientes como un perro al inicio del verano, una cabaña en el bosque... y una maldición. En 1981 un tal Sam Raimi, a base de talento y originalidad termina por firmar en uno de los clásicos del cine de terror. El plano secuencia del bosque en los primeros compases del metraje, y el lápiz clavado y retorcido en el tobillo, son dos escenas difíciles de olvidar. 'Posesión Infernal' vuelve de nuevo en forma de serie con Bruce Campbell, el Ash original.
3) 'Solos en la oscuridad' (1982)
Otro clásico del terror, la locura. El loco más famoso del cine es el veterano Jack Nicholson, que filmó miradas de verdadero psicópata como el Joker, McMurphy en 'Alguien voló sobre el nido del cuco', y, seguramente cara de loco más famosa de la gran pantalla como Jack Torrance en el Hotel Overlook. Sigamos moviéndonos en los clásicos de este subgénero protagonizado por desequilibrados, y vayámonos a 1982 con 'Solos en la oscuridad'. Esta película no tiene el relumbrón que puede tener toda producción en la que Nicholson está implicado, pero es un clásico de los manicomios. Un grupo de pacientes se escapan de un centro sanitario para llevarse por delante a la familia de su psiquiatra.