El 14 de Mayo 2015 | 09:00
Uno de los juegos más aclamados de PlayStation 2 vuelve con nosotros el próximo viernes 15 de mayo, se trata de 'Final Fantasy X', y lo hace por segunda vez en los últimos tiempos después del debut de 'Final Fantasy X/X-2 HD Remaster' hace poco más de un año a PlayStation 3 y PS Vita. En esta ocasión le toca el turno a la consola de nueva generación de Sony, PlayStation 4, que recibe el mismo pack compuesto por 'Final Fantasy X' y 'Final Fantasy X-2' lanzado en sus hermanas mayores, aunque eso sí, con una pequeña mala noticia para los cazadores de trofeos, ya que estos son compartidos por las tres plataformas.
Todos aquellos que aún no han podido disfrutar de la aventura de Yuna y Tidus tienen una nueva ocasión. En este articulo, para ir amenizando la espera hasta el lanzamiento del juego, hemos realizado un recopilatorio de los que son para nosotros, algunos de los mejores momentos de 'Final Fantasy X'. Obviamente no estarán todos (siempre se queda alguno en el tintero), pero en estas líneas podréis encontrar desde momentos que generan un antes y un después dentro de la historia, meras anécdotas o algunos detalles que pueden pasarse por alto si uno no está atento en el instante adecuado. Los más fanáticos del juego seguro que no le pillan por sorpresa ninguno de ellos, pero es una buena excusa para rememorar, en la humilde opinión de quien escribe este artículo, algunos detalles del último gran juego de una de las sagas más importantes de todos los tiempos. Así que sin más dilación, vamos a empezar a desgranar todos y cada uno de estos momentos claves.
EL SIGUIENTE TEXTO CONTIENE SPOILERS
1. La destrucción de Zanarkand
No debemos de esperar mucho tiempo para disfrutar del primer gran momento que vivimos en esta épica aventura. Todos los que hemos jugado alguna vez a 'Final Fantasy X' recordamos claramente la escena en la que nuestro protagonista Tidus, una estrella del blitzball y jugador franquicia de los Zanarkand Abes, está realizando su único e inigualable chut esfera en medio de un partido cuando irrumpe Sinh en escena (bajo la atenta mirada de Aurón), para destruirlo todo y reducir la que por aquel entonces era la ciudad más importante de Spira, Zanarrkand, una metrópolis enorme con unos edificios espectaculares, a un montón de escombros. Las cinemáticas de la destrucción de Zanarkand es algo que todos recordamos, y el punto de partida de todo lo que en un principio (y durante buena parte de la aventura) busca Tidus: encontrar la forma de volver a su hogar, del que fue alejado a la fuerza . Una situación dura que tiene que afrontar ocultando durante buena parte del juego la verdad sobre su persona.
2. La llegada a Besaid
El segundo gran momento que tiene el juego también es bastante cercano al inicio, en realidad es un momento más bien cómico o divertido que aporta poco argumentalmente por sí solo, pero que es la base de todo, ya que en Besaid es donde realmente comienza esta gran aventura. Después de haber hecho algún que otro trabajillo para los Albehd (y para Rikku, que será nuestra compañera en un futuro no muy lejano), Sinh los ataca y Tidus acaba despertando en la orilla de una playa, donde hay un equipo de blitzball entrenando. Se les escapa un balón que él remata con el chut esfera dejando a todos alucinados. Acto seguido Wakka se acerca y le pregunta en qué equipo juega, cuando Tidus contesta que es la estrella de los Zanarkand Abes, todo el equipo se parte de risa. Posteriormente Wakka intenta convencer a nuestro protagonista de que en realidad está enfermo debido a la toxina de Sinh, y que esto ocurre al estar demasiado cerca del monstruo, motivo por el cual Tidus no puede recordar "realmente" de donde viene. Wakka le asegura a Tidus que lo mejor que puede hacer si es jugador de blitzball es ir junto a él y su equipo al torneo que se disputa en Luca, y encontrar allí alguna persona que le conozca. Después de este encuentro es cuando nos vamos a Besaid. Allí conocemos a Yuna, una joven invocadora que empieza su peregrinaje para librar a Spira del temible monstruo, junto a sus guardianes: Lulú, Kimahri, Wakka y ahora también Tidus (aunque no será hasta más adelante cuando se convierta en guardián).