El 30 de Agosto 2015 | 09:37
En nuestro serial sobre las entregas anteriores de 'Metal Gear Solid', hoy toca repasar 'Ground Zeroes', el polémico prólogo de 'Metal Gear Solid V: The Phantom Pain', y que resulta prácticamente imprescindible rejugar a día de hoy. A pesar de su duración, este cortísimo título sirvió sobre todo para volver a poner al frente del sigilo a una franquicia que en los últimos años había visto como otras como 'Hitman' o 'Deus Ex' habían cogido un gran impulso gracias a nuevas mecánicas implementadas y al tiempo que había pasado desde 'Metal Gear Solid IV: Guns of the Patriots'. Su segundo objetivo, también cumplido, era enlazar argumentalmente de manera lógica 'Metal Gear Solid: Peace Walker' con 'The Phantom Pain', en una nueva muestra por parte de Hideo Kojima de que la entrega que en su momento llegara a PSP tiene más importancia de la que habitualmente se le da.
Hay ocasiones en las que menos es más, y si hablamos de 'Metal Gear Solid' y de los 4 años desde su anterior entrega, 'Ground Zeroes' fue muchísimo. Por entonces, hace algo más de un año, pensábamos que estábamos a solo unos meses del lanzamiento de 'The Phantom Pain', ya que a pesar de que la fecha de este aún estaba por confirmar, se daba casi por hecho que llegaría en otoño, o como muy tarde, finales de 2014. Finalmente hemos tenido que esperar más de 12 meses para contemplar el final de una franquicia que es historia viva -viva al menos de momento- de los videojuegos, y 'Ground Zeroes' fue un pequeño atisbo de lo que no espera el próximo 1 de septiembre. Vamos a repasar que fue lo que más, y lo que menos nos gustó de él.