El 17 de Julio 2017 | 14:14
1) La película resulta ser de dominio público, quiere decir, que no posee ningún tipo de derecho de autor. Esto no es fortuito, ya que se trata de una negligencia por parte de la distribuidora Walter Reade Organization, por no poner el aviso de copyright en las impresiones que se distribuyeron. Lo que sí se hizo bien fue el reclamo publicitario, ya que la distribuidora contrató una póliza de seguro de 50.000 dólares para cualquier persona que muriese de un ataque al corazón mientras veía la película.
2) La palabra ''zombie'' nunca es usada en la película (ni en el resto de la saga '... de los muertos'). El eufemismo más cercano utilizado en el filme para describir a los muertos vivientes era ''esas cosas''. No imaginamos hoy en día nuestro vocabulario sin esta famosa palabra.
3) La idea principal del argumento trataba acerca de un niño que huía de casa y que descubría un campo de muertos cristalizados. Los alienígenas los dejaban en esta forma para luego poder comérselos. El también guionista, John A. Russo le enseñó esta segunda idea a Romero que también descartó, aunque le gustó la parte donde se comían a la gente.
OTRA HISTORIA TAMBIÉN MUY CONOCIDA
4) Una de las inspiraciones para la película, fue la famosa novela de terror 'Soy leyenda' de Richard Matheson, la cual se ha convertido en un clásico del terror, la cual también tiene su adaptación al mundo del cine, protagonizada por Will Smith, siendo la favorita de muchos fans del cine post-apocalíptico.
5) La película contaba con un presupuesto de 150 mil dólares y todo debía salir de ese dinero. En parte, ayudó bastante que la cinta se rodara en blanco y negro. Las entrañas de las víctimas fueron suministradas por un carnicero a un precio total de 300 dólares y todo el vestuario de los actores era ropa de segunda mano.
6) La escena donde aparece el zombie desnudo de espaldas se hizo de noche. Mucha gente del pueblo de Evans se acercó al rodaje con sus sillas plegables y se sentaron alrededor como si estuvieran viendo una película.
SIN ESPECIALISTAS
7) Para dar realismo a las escenas, el actor Bill Hinzam y el guionista John A. Russo se prestaron voluntarios para que les prendieran fuego. En la escena donde Ben prende una silla para distraer a los zombies, uno de los técnicos en el rodaje echó gasolina en la silla. Esta súbita llamarada entró en contacto con el recipiente de gasolina y uno de los miembros del equipo se vio envuelto en llamas. Por suerte, consiguieron apagar las llamas antes de que tuviera quemaduras graves.
8) La carne que arrancan a nuestros sufridos protagonistas es en realidad jamón asado. La sangre, por otra parte, se consigue con sirope de chocolate. Imaginamos que las caras tan extrañas que ponían los zombies son más que reales...
- - Introducción.
- - PARTE I.
- - PARTE II.