El 22 de Abril 2015 | 08:20
Cuando una franquicia lleva la friolera de 23 años al pie del cañón, es de justicia elevarla a la categoría de leyenda. Seguramente ni los propios Ed Boon y John Tobias se pudieron imaginar en 1992, cuando desarrollaron el primer 'Mortal Kombat', que su creación daría lugar no solo a la controversia (algo que seguro preveían), sino a una de las licencias de más renombre en el género de la lucha a lo largo de todo este tiempo. De hecho, 'Mortal Kombat X' se ha convertido por derecho propio en el primer gran lanzamiento del género para la nueva generación, y con las credenciales del título que vio la luz en 2011, las expectativas eran máximas. Unido a un sistema de combate eficaz y sencillo (que no simple), lleva consigo una cantidad enorme de contenido para el que guste de jugar solo, algo que hay que aplaudir en tiempos de micropagos para skins, trajes, escenarios, etc... Por ello, sería injusto juzgar esta franquicia solo por su contexto ultraviolento, cuando tiene innumerables virtudes que ofrecer.
Una de ellas es su plantilla de personajes. Desde el principio ha apostado no solo por la cantidad, demencial en algunas entregas, sino por su calidad y diversidad, presentando una alineación llena de héroes y villanos con grandes diseños y bien diferenciados en combate. Para 'Mortal Kombat X' esta suma asciende a 22 (más Goro si lo hemos reservado), lo que no es en absoluto desdeñable, sobre todo teniendo en cuenta que no cuenta con las diferentes versiones de los cyborgs tales como Smoke, Sektor, etc... aparecidos en entregas anteriores. Al transcurrir la historia varios años después de 'Mortal Kombat', a los clásicos Jonny Cage, Sonya Blade o Raiden, hay que sumar los hijos de algunos de ellos más los que llegaran vía DLC, dos de ellos de un carisma tremendo: Jason Vorhees, villano de la serie de películas Viernes 13; y Predator, el temible alienígena que le hizo la vida imposible primero a Arnold Schwarzenegger y después a Danny Glover.
En esta galería fotográfica os presentamos a todos ellos, ya que hay muchos inéditos, además de señalar sus anteriores apariciones. Porque antes de enfrentarse a un enemigo, hay que conocerlo.