El 6 de November 2017 | 23:00
El ya conocido como 'Caso Weinstein' ha conseguido algo insólito: aunar a prácticamente toda la sociedad, y que una gran cantidad de personas se unan para denunciar la situación de abuso que viven las mujeres en el mundo cinematográfico. Si bien es cierto que este abuso no es algo que se dé única y exclusivamente en el cine, y ni mucho menos solo en el cine estadounidense, es un paso hacia delante el que se haya denunciado públicamente. Que los medios hayan decidido, finalmente, hacerse eco de algo que lleva sabiéndose años (aunque todos querían hacer oídos sordos) es todo un avance.
El cinco de octubre, Hollywood al completo se echó a temblar. The New York Times publicó una investigación que hizo ensordecer a todo el mundo: el más que reconocido productor estadounidense, Harvey Weinstein, fue acusado de haber acosado y agredido sexualmente a decenas de actrices. Una de las más sonadas fue Rose McGowan, que encontró la fuerza suficiente como para denunciar la violación que sufrió por parte de Weinstein.
Caso Weinstein
Poco después, Weinstein habló. Pidió disculpas públicamente, y se retiró de su productora, The Weinstein Company, por un tiempo. Aunque fue poco, puesto que el 8 de octubre le despidieron. Durante ese tiempo, cada vez más y más mujeres comenzaron a denunciar públicamente. Gracias al apoyo de los medios de comunicación, y gracias a que dejaron de sentirse solas, pudieron denunciar sin tanto temor.
Fue ahí cuando comenzó el verdadero infierno particular de Weinstein (recordemos, antes de nada, que nadie va al infierno siendo inocente): el once de octubre fue suspendido de la academia del cine británico (Bafta), y poco después fue expulsado también de la academia de cine estadounidense. Ya son más de ochenta mujeres las que lo han denunciado por agresión o acuso sexual.
El movimiento, la repercusión que esto ha tenido a nivel de medios ha sido increíble. Si bien antes se tapaban al máximo todas estas denuncias, para no molestar a los grandes magnates (que, a fin de cuentas, son los que pagan), ahora mismo nada de eso es importante. Ahora, por fin, las vejaciones que sufren las mujeres en esta industria es lo importante.