El 29 de Abril 2017 | 23:44
FemDevs lleva en marcha unos meses, pero ha crecido una barbaridad. Ya en su primer día alcanzaron los mil seguidores en su cuenta de Twitter. Esta cantidad de audiencia sorprendió en un primer momento a las fundadoras de la organización, aunque no más que el número de mujeres que se animaron a participar: "Sabía que éramos muchas, pero cuando me encontré con que un día éramos más de 100 me pregunté '¿dónde estamos? ¿Por qué no nos contratan? ¿dónde nos metemos o dónde nos meten?'. Pasa mucho que las chicas sufren síndrome del impostor, hay chicas geniales y creen que no sirven, por lo que necesitan un empujón específico para animarse a entrar en los sitios" declara África, y continua: "Pero claro, si se animan y luego las rechazan..."
Una industria machista
Se refiere ahora a otra cosa que ha aprendido en cierta manera a raíz de crear esta asociación. Ella ya sabía la cantidad de rechazo que había hacia las mujeres en la industria -"lo hemos vivido en nuestras carnes" apostilla Estefanía-, pero las historias personales le siguen sorprendiendo: "Me ha sorprendido la cantidad de mierda por la que pasa realmente nuestro género, porque una lo ve desde el punto de vista individual, ves las cosas que te pasan y a veces lo sabes interpretar, a veces no. Pero cuando pones en común con una persona de tu mismo género que han pasado cosas parecidas, empiezas a comprenderlas y a ver que en algunos casos han escalado hasta situaciones de acoso sexual y otras cosas muy bestias... Empiezas a darte cuenta de que no es solamente cosa tuya, de que estuvieses ahí, sino de que de verdad hay una problemática muy gorda e interiorizada".
En este sentido Estefanía declara que desde FemDevs están pensando en algún tipo de inciativa para dar a conocer esas "experiencias personales que mucha veces no podemos contar". Creen firmemente que "si a gente pudiera escucharlas se daría cuenta de que su punta de vista respecto a la industria es súper limitado", por eso se están planteando abrir un apartado en su blog para que las mujeres que han pasado pos situaciones delicadas puedan darlas a conocer de forma completamente anónima.