El 19 de Abril 2017 | 00:01
7. Un cocinero experto
Entre otras muchas cosas, Ralph es un cocinero experto. Y si no que se lo digan a su amado padre, que tuvo el placer de degustar uno de los sándwiches más curiosos de la faz de la tierra. "¿Notas el saber a chincheta?", le preguntó el pequeño, con una cara de ilusión inconmensurable.
8. ¡Corre, plátano!
De nuevo, Ralph nos ha dejado otros de esos momentos que repetiremos una y mil veces en el autobús con nuestros amigos. Bart y Nelson deciden hacer una carrera de frutas, lanzando uno una manzana y otro una naranja, y ganando el que consiga que su fruta llegue antes al final del autobús. Y Ralph, ni corto ni perezoso, decide apuntarse a la competición. El problema es que eligió una fruta que no corría demasiado, como es el platano... Pero, bueno, ¡la intención es lo que cuenta!
9. Ralphi, baja del escenario, cariño
En pleno concurso para ver quién consigue hacer la central nuclear más bonita de todas, Ralph se presenta con su casa de la Stacy Malibú retocada. Por supuesto, la reacción de todos es la de quedarse en silencio (excepto el Sr. Burns; él siempre tiene algo negativo que decir). Su padre, siempre protector, y buscando lo mejor para su pequeño, se da cuenta de que Ralph no está comprendiendo lo que está pasando, y pretende seguir en el escenario subido. Es entonces cuando le dedica una frase tan breve como contundente: 'Ralphi, baja del escenario, cariño'. No hace falta nada más.
10. Soy un unicornio retrasado
¿Cómo íbamos a olvidar un momento que tanto se ha repetido en las redes sociales? Ralph ha conseguido que la figura del unicornio vuelva a cobrar fuerza. Y lo único que tuvo que hacer es colocarse un helado de cono en la cabeza y decir "soy un unicornio retrasado". ¡Ralph sí que es un auténtico influencer!
Bonus: El aliento de mi gato huele a comida de gato
¿Cómo íbamos a olvidar este momento? ¡Imposible! Y es que Ralph presumiendo de haber ganado a las listas, quejándose de haberse torcido el "tubillo" y señalando que el aliento de su gato huele a comida de gato, todo en menos de dieciséis segundos... ¡Es una auténtica joya televisiva!
- - Ralph Wiggum
- - Parte I
- - Parte II
- - Parte III