El 28 de Agosto 2016 | 11:10
Por otro lado tenemos a PlayStation NEO que tiene un enfoque totalmente diferente, ésta consola no pretende facilitar el acceso a un catálogo por un precio económico, no pretende vender más software, lo que pretende es contentar a un determinado público "hardcore" que demanda más potencia, mejores gráficos, más framerate, más resolución...algo más "premium".
Dos públicos diferenciados
Es decir, tendríamos sobre la mesa un ecosistema PlayStation 4 con una PS4 base (la PS4 Fat dejará de producirse, según rumores) que por un módico precio te permite acceder a un catálogo de juegos, unos determinados servicios etc y por otro lado una PS4 NEO más potente que por más dinero ofrece mayores prestaciones. Ambas compartiendo el mismo catálogo, el mismo mando, el mismo sistema operativo, la misma infraestructura online...todo igual, salvo el rendimiento. El usuario será el encargado de decidir que PS4 le conviene más, algo barato y peor o algo caro y mejor. Tendremos un mayor abanico de posibilidades.
Otro factor de gran importancia es la realidad virtual, como bien sabéis el próximo 13 de Octubre sale a la venta PlayStation VR, las gafas VR de Sony compatibles con PS4. El hecho de lanzar una PS4 Slim más barata y compatible con PSVR puede ser un buen combo de ventas por un precio atractivo en comparación al desembolso que supone la competencia.
El precio del éxito
Hablando de precios y aquí me mojaré, diría que PS4 Slim debería costar 249 euros en su versión de 500Gb y 299 la de 1Tb. Recordemos que la PS4 actual se está vendiendo por 340 euros. Mientras que la PS4 NEO creo que rondará los 449 euros o incluso los 499 euros.
Son unos precios lógicos si pensamos en la estrategia comentada, una PS4 barata para ampliar la base de jugadores y ganar más dinero con la venta de software y una PS4 cara para complacer al jugador exigente.
También tenemos que tener en cuenta que aunque Sony vaya liderando en ventas la competencia irá sacando también sus armas, como Project Scorpio en el caso de Microsoft como "la consola más potente jamás creada" o Nintendo con su consola híbrida NX. En vista de esto Sony debe aprovechar el tiempo y la diferencia de base de jugadores para expandirla todavía más, antes que la competencia sea capaz de quitar una gran cantidad de potenciales clientes.