El 17 de Noviembre 2015 | 10:30
Una toma de contacto agridulce
Si, la ciudad de París vista en 'Assassin's Creed Unity' fue una maravilla a nivel de diseño y detalle, pero esa ambición, seguramente desmedida, se terminó pagando en forma de un estado en el momento de su lanzamiento totalmente inaceptable. Las capturas de pantalla lucían magníficas, pero en el momento en que el juego se ponía en movimiento, comenzaban unos problemas que solo pudieron solucionarse tras varios parches de muchos gigas: bugs, caídas de frame rate... La mayoría de esos errores no entorpecían la experiencia, pero sí fueron lo suficientemente graves como para emborronar un apartado técnico, por lo demás, fantástico. El salto respecto a 'Assassin's Creed IV: Back Flag' era más que evidente, y lo que más dio que hablar en su momento fueron las tremendas muchedumbres que se acumulaban en determinados lugares de la capital francesa.
En 'Assassin's Creed Syndicate' vemos una ciudad más oscura, con menos glamour, menos viandantes, etc... pero mucho mejor acabada. La fidelidad es extrema, pero lo mejor que se puede decir esta vez es que sí tenemos un producto terminado y pulido, a pesar de que no esté exento de muy puntuales bugs, como todo juego de mundo abierto que se precie -lo tenemos asumido y probablemente no debería ser así-. La tasa de frames se mantiene constante durante todo el recorrido, y aunque sea habitual en la franquicia, es una delicia para los oidos: la banda sonora es fantástica, y está siempre presente, y el doblaje está al nivel de siempre, es decir, de 10. Y esta vez, sin actuaciones discutibles que lo puedan deslucir.
Conservadurismo y un pequeño paso adelante
Obviamente, la primera palabra de este apartado se refiere a la jugabilidad de 'Assassin's Creed Unity'. En Ubisoft debieron pensar que ya era demasiado con hacer una ciudad más grande y detallada como para pararse a pensar en introducir nuevas -y necesarias- novedades jugables. Lo más mejorado en este sentido fue la fluidez a la hora de recorrer la ciudad, con unas animaciones realmente buenas en el parkour, y un intento -fallido- por avanzar en la eterna asignatura pendiente: la IA enemiga y el sistema de combate. Esta entrega fue extremadamente conservadora en lo jugable, y a pesar de que ofrecía más cosas que hacer como nunca antes en la franquicia, se terminó el mapa llenando de cofres, coleccionables y misiones sin sentido que no hacían sino de un relleno que probablemente no hubiera hecho ninguna falta.
Por fortuna, la Revolución Industrial que vivimos en 'Assassin's Creed Syndicate' da pie también a nuevas situaciones, como todas aquellas con los carruajes como protagonista: persecuciones, robos, etc... No solo sirven como un medio de transporte extremadamente útil en la gran capital londinense, sino como una -buena- excusa para presentar una variedad de misiones única en la histora de la franquicia, y no solo en cuanto a cantidad, sino calidad, sobresaliendo las que tienen como protagonista a personajes célebres de la época. Otra magnífica manera de trasladarse por la ciudad la vemos gracias a Graham Bell y su gancho, con el que alcanzar puntos elevados o desplegar tirolinas de un lado a otro: un añadido mínimo, pero que hace mucho por el juego.
La presencia de Jacob Frye, experto en combate, ha hecho que este aspecto haya dado el mayor salto en muchas entregas, pero sin ser capaz aún de llegar a un nivel que se pueda considerar satisfactorio. Las animaciones son más fluidas, es más intuitivo y menos torpe, pero gracias a mantener esa actitud de espera en los enemigos, donde si somos rodeados solo uno o dos nos atacarán al mismo tiempo. De nuevo, y a pesar de que comienza a atisbarse un avance en este sentido, habrá que esperar una entrega más para que podamos disfrutar de un sistema de combate a la altura. Sin embargo, las mecánicas de sigilo siguen siendo tan variadas como siempre, y las herramientas para acometer nuestros asesinatos, mayores que nunca.
Conclusiones
En su momento, y a pesar de sus errores técnicos, 'Assassin's Creed Unity' me pareció un buen juego. Un año después, y vistos muchos aciertos de 'Assassin's Creed Syndicate', es cuando me doy cuenta de la gran cantidad de cosas que se podrían haber hecho un poquito mejor. Sin embargo, esto solo lo puedo tomar como algo positivo, ya que al fin y al cabo no quiere decir otra cosa que no sea que entre una entrega y otra se ha producido un paso adelante. Este paso se ha producido sobre todo en la obsesión por lanzar un juego terminado y evitar ser objeto de vídeos recopilatorios de bugs y ese tipo de cosas, mientras que se han añadido algunas pequeñas novedades jugables que probablemente no veremos en futuras entregas: los carruajes, las guerras de bandas, el gancho... Son añadidos que han encajado en 'Assassin's Cred Syndicate' gracias a su contexto histórico, y no lo harían en ningún otro. ¿Es este el camino que debe seguir la franquicia? Probablemente. El ciclo de dos o tres años de desarrollo tomado a partir de ahora debería servir para que cada estudio sea capaz de explorar todas las vicisitudes de cada época e incorporar las novedades pertienentes para ser capaz de mantener la esencia, pero al mismo tiempo, que cada entrega pueda sentirse diferente.