9 ejemplos de DLCs que sí merecen la pena

'Bloodborne: Antiguos Cazadores' (2015)

Ya es la segunda vez que From Software aparece en este reportaje. Y la verdad, podría haberlo hecho más veces, porque los DLCs de 'Dark Souls 2' y 'Dark Souls 3' también son geniales. Pero no podíamos tenerlos ocupando todos los puestos de esta lista, así que nos hemos decantado por sus dos mejores trabajos en el campo de los contenidos descargables.

'Antiguos Cazadores' expande el trasfondo del juego para centrarse en los primeros cazadores de la Iglesia de la Sanación que asesinaban bestias a diestro y siniestro con sus sanguinarias y rudimentarias armas. La Pesadilla del Cazador hacía honor a su nombre, mostrándonos las auténticas atrocidades que la Iglesia llegaba a acometer con tal de establecer contacto con los Grandes.

Dejando a un lado el montón de armas y enemigos nuevos que nos encontrábamos aquí, este DLC hace gala de algunas de las zonas más tétricas y escalofriantes de toda la saga, como el Pabellón de Investigación o la Aldea Pesquera. Y como no, jefes finales que quedaron para el recuerdo; nunca te olvidaremos, Lady María.

'LISA: The Joyful' (2015)

Este reportaje necesitaba su buena ración de indie, y está viene representada por la obre de Austin Jorgensen. Las dos primeras entregas de 'LISA', 'The First' y 'The Painful', son relatos de auténtica decadencia y miseria. Sobre todo 'The Painful', que es el más conocido, muestra algunos de los aspectos más desagradables del hombre al mismo tiempo que hace gala de un humor lleno de cinismo. El resultado es una historia tan desgarradora como cachonda.

'The Joyful' es el DLC que continúa esa historia, heredando las mecánicas de juego de 'The Painful'. Es decir, se trata de un RPG con combates por turnos muy influenciado por 'Earthbound' y en el que exploramos entornos en 2D. La diferencia es que aquí el protagonsita es distinto, y eso se traduce en todos los aspectos posibles, desde el tono de la trama hasta nuestros actos e incluso la forma en la que peleamos. 'LISA' nos muestra una vez más la crueldad de este mundo habitado solo por señores con los pezones al aire.

'The Witcher 3: Blood and Wine' (2016)

El último puesto de esta lista se lo lleva otra de esas elecciones obvias. Si 'The Witcher 3' ya era mastodóntico en cuanto a extensión y duración, sus dos DLCs son la guinda sobre el pastel, y luego otro montado de nata con una tableta de chocolate por encima porque somos unos golosos y siempre tenemos ganas de más.

En 'Blood and Wine' viajamos a Toussaint, una nueva tierra claramente ambientada en la zona del Mediterráneo europeo, donde su clima cálido y vivaracho nos da la bienvenida para introducirnos a una trama de vampiros en la que regresan personajes clásicos de las obras literarias. Completar la historia principal de 'Blood and Wine' puede llevar unas 20 horas, que ya es mucho decir incluso para juegos completos, pero esta expansión no se ha ganado el favor de todo el mundo solo por añadir más cosas, sino por saber dar un giro a la ambientación y a las tramas habituales del juego base que la hacen sentir diferente.