El 14 de Diciembre 2016 | 10:03
37. 'Ninja Gaiden II'
Hay gente que desea que los videojuegos supongan un gran reto, algo difícil de superar para que la satisfacción al terminarlo sea excelente. En 2008 vimos en Xbox 360 eso hecho realidad con la secuela de uno de los juegos más difíciles del momento: la segunda parte del reboot de una de las sagas más complicadas de NES, 'Ninja Gaiden II'.
Este hack'n'slash está protagonizado por Ryu Hayabusa, un ninja que debe proteger el mundo de del clan de las Arañas Negras, que planean el regreso de un demonio todopoderoso capaz de destruirlo todo. En su viaje derrama toneladas de sangre, uno de los puntos por los que es más conocido el título. Podemos incluso desmembrar a nuestros enemigos hasta cubrirnos de sus glóbulos rojos; los estómagos más sensibles no deberían acercarse a esta entrega.
Pero si te ves capaz de soportarte (y divertirte) con todo el gore que el juego es capaz de ofrecerte podrías encontrar toda una maravilla en esta obra. Se trata de un juego que sabe aprovechar al máximo su género, llevando hasta el límite las habilidades de sus jugadores y con una historia intensa y cinematográfica.
36. 'Undertale'
En 2015 el desarrollador independiente Toby Fox sacó a la luz uno de los videojuegos indies con mejor recepción de la crítica que han podido verse hasta la fecha: un RPG con estética nostálgica, donde encarnas a un niño (o niña, ya que el avatar no tiene género definido) que deberá exponer su corazón, de la forma más literal, a los monstruos a los que tendrá que enfrentarse. Llegaba 'Undertale', una historia capaz de influenciar en los corazones de muchos.
Este curioso videojuego se presenta a sí mismo como un RPG por turnos al que se le mezcla con elementos del subgénero 'bullet hell', que consiste en esquivar todos los ataques que se nos pueden lanzar. Su historia se centra en los muchos personajes que nuestro protagonista puede encontrarse por el camino, monstruos que desconfían de los humanos por las atrocidades de las que son capaces. Y hacen bien, pues está en tu mano decidir cómo quieres afrontar el título.
No sólo debes atender a su argumento si le das una oportunidad a este título, sino a tu propio corazón. Puedes pasártelo masacrando enemigos a tu paso, aumentando tu experiencia y nivel y así facilitando enormemente tu paso; o puedes ser pacifista e intentar avanzar esquivando ataques y perdonando a aquellos que intentan matarte. El final del juego varía enormemente dependiendo de tu forma de afrontarlo y habla muy bien de la vida misma. Porque, igual que en la vida, abrirte camino haciendo el bien es a veces demasiado duro... Y sólo tú puedes elegir si merece la pena.