Vaya por delante que este artículo no pretende entrar en las ridículas guerras de consolas y estas cosas que, lamentablemente, vemos cada vez que Microsoft o Sony presentan novedades sobre Xbox Series X y PS5 respectivamente. Pero el hecho de que, al menos inicialmente, esta última no vaya a tener retrocompatibilidad con las consolas anteriores a PS4, sí hace que sea un buen momento para hablar sobre el tema. Y, para empezar, es aquí donde tengo que decir que los rumores hacen mucho daño a esta industria. Los medios somos los primeros que los publicamos, es verdad. Pero muchas veces es lo que toca, independientemente de si nos sentimos cómodos con eso. El problema, es que tiene que ser nuestra responsabilidad filtrar aquellos que pueden ser interesantes de los que no.
Expectativas falsas
Y aún así, si salen a la luz, puede resultar fácil caer en el error de ilusionarse o crear unas expectativas que en realidad pueden ser falsas. Con el tema de la retrocompatibilidad y PS5 ha pasado un poco eso. Se habló de patentes que permitían que la consola ofreciera retrocompatibilidad con todos los sistemas anteriores. Y aunque esa sería una de esas noticias menos dañinas, porque al fin y al cabo la patente existe, volvemos a lo mismo: crea expectativas innecesarias. Ya habría momento de hablar sobre el tema, si realmente la patente llegaba a algún lado.
Una vez aclarado esto, que es importante para entender también el motivo por el cual luego el golpe puede ser más fuerte, tengo que decir que me siento apenado al ver que el camino que dibujó Xbox con el tema de la retrocompatibilidad no está siendo seguido por otras compañías. Sí, puede que con eso hayamos conseguido que PS5 se plantee, al menos, la compatibilidad con juegos de PS4, pero es insuficiente. También entiendo que los amantes del retro somos "muchos menos", en comparación con los que realmente pueden dar dinero a las empresas. Y justamente por eso creo que no se han liado con consolas anteriores, de momento. De todas formas, el tema es mucho más preocupante que eso. Y me explico a continuación.
En el pasado, esa falta de retrocompatibilidad se suplía con el hecho de que llegaban una gran cantidad de remasters y juegos clásicos (por ejemplo en la Store o en la eShop de Nintendo, a base de Consola Virtual). Y aunque era engañoso, porque había que pagar una vez más por un juego que muchos ya teníamos en propiedad, por lo menos era una solución interesante y la cual agradezco enormemente (jugar en Vita o en 3DS grandes clásicos de SNES o PSX no tiene precio, por ejemplo). Sin embargo, a día de hoy se han olvidado de estos lanzamientos. Ya vimos hasta dónde llegó lo de clásicos de PS2 para PS4, y Nintendo solamente añade sus juegos retro a través de la suscripción Online de Nintendo Switch.
Al menos tenemos remakes
¿A dónde quiero llegar? Muy sencillo: esa solución "a medias" que teníamos en el pasado, ha ido evolucionando a peor. Con remasters de juegos de tan solo una generación anterior (de PS3 o Xbox360 a PS4 y Xbox One hay un montón), pero volviendo a pagar. Y también con suscripciones de pago que, al final, tampoco dan acceso a ciertos juegos retro que antes sí se podían comprar y que ahora solo funcionan en sistemas antiguos. Por lo menos tenemos remakes, que es algo que —no os voy a engañar—, también agradezco. Me encantan si se hacen bien. Y en muchos casos, como el de 'Resident Evil 2 Remake', son complementos perfectos del original. Pero eso, justamente, es otro problema si nos olvidamos de la retrocompatibilidad.
Vale, para el jugador nuevo que no vivió nunca la época del original, puede que el remake sea el único que vaya a necesitar. Pero los fans de 'Resident Evil 2', o de 'Final Fantasy VII' seguiremos revisitando los antiguos. Y aunque como amante del retro me encanta seguir usando mis consolas antiguas, es una pena que para jugarlos solo pueda recurrir o bien a su versión y consola original, o bien a través de tiendas digitales pero en consolas igualmente "obsoletas". Esperemos que, por lo menos, el excepcional (y no lo pongo en mayúsculas porque esto es un texto serio) trabajo de Microsoft con la marca Xbox siga convenciendo a las demás compañías de que ese es el camino. Y se puede tener todo, sin renunciar a los remakes o a los remasters. Cada uno que elija lo que prefiere, después. Algunos, como yo, se quedarían con todo.