Es probable que con el titular aún no tengáis claro cuál es mi punto de vista al respecto de la especulación, ¿verdad? Pues dejad que os lo cuente detenidamente. Efectivamente, estoy harto de la especulación, y cuando digo que forma parte del negocio, lo digo de un modo resignado, como sabiendo que nunca va a acabar. En el pasado pensaba que la especulación solo existía en determinados sectores, o para ser más exactos, en el mundo retro. Incluso llegaba a "comprender" que si un título del pasado resultaba bastante escaso en el presente (fuera porque no trajeron muchas copias en su día, o porque la gente no vende los suyos), era normal que el precio del mismo fuera muy alto. Hasta cierto punto, incluso podía entender que juegos tan míticos como 'Suikoden II' o 'The Legend of Dragoon' (por citar dos de mi consola favorita) tuvieran precios más altos al ser, además, juegos realmente buenos. Pero... ¿qué ocurre cuando te das cuenta de que la especulación va mucho más allá de una base lógica? Pues que no puedo ocultar la rabia que me genera como jugador y consumidor de videojuegos durante toda mi vida.
La especulación en el presente
Dejad que ponga algunos ejemplos actuales para que comprendáis a lo que me refiero. Antes he citado 'Suikoden II', ¿verdad? Pues yo, iluso de mí, pensaba que cuando el juego saliera en la Store europea, quizá bajarían los precios del original en formato físico. ¿Cómo pude ser tan inocente? Al principio me cuadraban los argumentos de que el juego nos había llegado en inglés, cuando el PAL español en su día estaba traducido en castellano. Vale, puedo entender que a mucha gente no le valga, y por lo tanto el físico se siga vendiendo caro. Pero... ¿y qué pasa con la primera entrega? Que yo sepa, no solo llegó a la Store el mismo día que su secuela, sino que lo hizo en inglés también. Es decir, en el mismo idioma en el que, en este caso, nos había llegado en su día el original. ¿El resultado? Su precio tampoco ha bajado, y de hecho sigue subiendo por momentos. Es solo un ejemplo de como, por más cosas que pasen o puedan pasar, hemos entrado en un bucle del que ya es imposible salir. Y sino, fijaos en todas las tiendas especialistas retro que existen, los mil mercadillos que hay en Internet, o las nuevas aplicaciones del tipo 'Wallapop'. El olor a especulador está por todas partes...
Sigamos con otro par de ejemplos actuales. Por un lado, la reciente estrenada NES Classic Mini. Vale, es un producto basado en una consola retro. Pero... ¿significa el hecho de que se haya agotado tan rápido que los precios suban tanto en el mercado de segunda mano? La respuesta es sencilla: una vez más, la base parece lógica, pero es una nueva excusa para que todos aquellos que se dedican a eso (y que son muchísima gente, tanto particulares como empresas) puedan sacar partido. ¿Seguís pensando que tengo paranoias? Puede ser, pero, sin ir más lejos, hace unos días leíamos por ahí que la propia eBay animaba a los poseedores de la NES Classic Mini a venderla por grandes cantidades de dinero, a cambio de promociones exclusivas (no tenéis más que "googlear" un poco para ver que no estoy mintiendo). Y por otro lado, para mí no se libra ni la propia Nintendo. ¿Acaso les interesa que sus productos se conviertan en carne de cañón para esos "impresentables"? ¿No sería más fácil reponer el producto con unas cantidades que acabara con el tema? Yo creo que sí, y no es precisamente lo que han hecho.
Pero no son los únicos casos en los que esto ocurre. También hay "jugadores" que aprovechan cuando aparecen objetos más exclusivos (o de coleccionista) para comprar varios de golpe y luego especular cuando ya no se encuentran en el mercado. Lo vimos con las pocas PS4 edición 20 aniversario, y ocurrió también con los Dual Shock 4 del mismo motivo. Es más, yo soy testigo de como un chaval entró en un Game y se compró 20 mandos el día del lanzamiento. Y se la tengo jurada, porque acabó las existencias de esa tienda, y finalmente yo me quedé sin ese mando. ¿Qué pasa ahora? Que de los 70 euros que te pedían (y que ya me parecían excesivos en su día), ahora me pidan cantidades que duplican o hasta triplican ese precio... No es que quiera que la gente malvenda sus cosas. Y de hecho sé que es utópico: ¿cómo conseguiríamos separar aquellos que venden de forma honesta de aquellos que solo se aprovechan del mercado? Pero, sin embargo, tengo muy claro que cada vez es algo más global, y de que no solo es culpa de los consumidores, sino también del propio sector y las empresas que lo permiten.
En definitiva, que aunque a mí siempre me gustaría ver las cosas de color de rosa, soy consciente de que no es así. Y por ende, si las propias compañías nos sacan el dinero de forma indiscriminada en muchas ocasiones, y aplican políticas sin sentido solo para para sacar unos cuartos de más, ¿cómo no van a hacer lo mismo los consumidores? Es normal, ¿no? Hay un negocio montado, y si puedo formar parte de él, ¿por qué no iba a hacerlo? Pero sinceramente, una cosa es comprenderlo, y otra muy distinta es compartirlo. Yo también he vendido alguna vez un juego que me había costado, pongamos... 10 euros, por 15 o 20. Pero mi caso era distinto: siempre lo vendía porque me hacía falta, con la consecuente posibilidad de arrepentirme ante ese juego que se marchaba de mi colección. Una cosa es vender algo a un precio justo, y otra cosa es dedicarse a utilizar los videojuegos como si formaran parte del mercado de valores. Evidentemente no tendría mucho sentido que si un día me he comprado un 'Suikoden II', y a la larga tengo que venderlo, lo regalara. Pero es tan sencillo como que si a mí no me tiene que costar 200 euros, seguramente tampoco me importará venderlo por 50. Lo sé, soy un idealista. Pero es que echo de menos aquellos tiempos en los que los Cash no sabían ni qué vendían, o en los que muchos particulares eran realmente honestos. Qué le vamos a hacer...