Nintendo ha hecho una entrada triunfal para este año 2019. La gente de Kyoto sabe como gestionar la expectación de su público y, aunque han habido importantes ausencias, el último Nintendo Direct de la compañía nos ha dejado con grandes oportunidades para la consola híbrida. Una muestra de cuál es su nuevo modelo de apuestas. Uno que ya no tiene en mente a su predecesora portátil pero que no parece olvidar la nostalgia.
'Fire Emblem: Three Houses', 'Oninaki' o 'Astral Chain' son grandes apuestas para el futuro de esta nueva realidad que ha conseguido construir Nintendo. Pero, incluso así, es la octava generación 'Pokémon' —una de las grandes ausencias de la presentación— la que sigue ostentando toda la expectación de su público. Game Freak tiene un gran peso sobre sus hombros. No solo en lo que a hype se refiere, sino a cómo gestionar la llegada de un clásico inmortal como 'Pokémon' a la consola híbrida de Nintendo.
Es hora de evolucionar
Y es que la llegada de Nintendo Switch ha supuesto cierta revolución para las entregas que se gestionan bajo el amparo de la gente de Kyoto. 'The Legend of Zelda: Breath of the Wild' y 'Super Mario Odyssey' han sido venerados por esa reformulación de sus raíces mientras que 'Three Houses' propone una nueva visión de la estrategia clásica de 'Fire Emblem', siguiendo su afán por reinventarse en cada entrega.
Entonces, ¿qué esperar de la octava generación? Es, quizás, algo pronto para especular. Y es que aunque el juego se encuentra a la vuelta de la esquina, sus desarrolladores han sido cautos a la hora de revelar detalles. Los primeros rumores apuntan a que su escenario se situará sobre Europa. Una oportunidad, quizás, para trabajar en un juego extenso, que muestre un mayor número de regiones aprovechando la heterogeneidad del viejo continente. Y es que desde el lanzamiento de la segunda generación se ha estado pidiendo el regreso de un título con más de un territorio por el que desplazarnos.
Aprovechar el concepto de 'Breath of the Wild' y optar por un mundo más abierto podría ser una gran opción, pese a que la franquicia siempre ha sabido trabajar sobre sus dimensiones lineales. Un formato sobre el que difícilmente podría casa la fórmula clásica. Una que, incluso así, lleva siendo usada desde el lanzamiento de 'Pokémon Rojo' y 'Azul' y apenas cuenta con espacio para nuevos arreglos. Con todo, los cambios introducidos en 'Pokémon Sol' y 'Pokémon Luna' tampoco contaron con gran aceptación, por lo que sería de esperar que nos encontrásemos ante un modelo que aprovechase, a lo sumo, parte de su experiencia.
No negaré que soy el primero en no encontrarse cómodo ante los cambios de la séptima generación, pero quizás la llegada a la híbrida pueda brindar el espacio suficiente para formular una nueva experiencia. Sin gimnasios, sin obligatoriedad de trazar una ruta fija, medalla, tras medalla. Pero con una mayor seriedad y una libertad más depurada.
De nuevo, es pronto para especular, pero Game Freak ha tenido tiempo y se conoce que su equipo más veterano está trabajando en el juego así que hay esperanza. Esperanza y expectación. Porque la nueva generación 'Pokémon' podría ser la que aplicase, de una vez por todas, la mayor coherencia argumental de la franquicia. Una donde realmente se potencie la idea de vivir una aventura junto a nuestros compañeros sin necesidad de encontrarnos atados a las limitaciones de su sistema original. Pero una donde tengamos algo más que Kahunas, pokémons dominantes y un rival con poco carisma. 'Pokémon' tiene la gran oportunidad de volver con una nueva experiencia este año y marcar un nuevo punto en su historia.