Continuan las disputas entre ZeniMax y Oculus VR. Y aunque nos tenemos que remontar a mayo de 2014 para encontrar los orígenes de la polémica entre ambos, la verdad es que hoy se ha escrito un nuevo capítulo en esta historia tan enrevasada. Si hasta día de hoy todas las quejas de ZeniMax eran en alusión a Oculus en general, ahora centran sus miradas hacia 'John Carmack' en particular. Sí, porque como bien sabréis, 'John' es considerado como el padre de 'Doom', saga que pertenece a Id Software (que él mismo fundó junto a otros como 'John Romero'), cuyos derechos pertenecen precisamente a ZeniMax. Pues bien, según la compañía americana, 'Carmack' no solo robó documentos mientras aún era miembro de su empresa, sino que encima continuó haciéndolo cuando ya la había abandonado, pasado el verano de 2013.
Oculus, el foco de la cuestión
Y es que la marcha de 'Carmack' del estudio no fue casual; más bien el motivo era ni más ni menos que la posibilidad de convertirse en el responsable de tecnología en Oculus VR. Momento en el cual, ZeniMax decidió demandar a la compañía, asegurando que 'Carmack' había desarrollado la teconología de Oculus Rift con 'Palmer Luckey' usando tecnología ya existente en ZeniMax cuando este aún estaba dentro de la compañía. Posteriormente, la compra de Oculus por parte de 'Facebook' (y con la friolera de dos mil millones de dólares) no hizo más que calentar el asunto. Ahora, las quejas de ZeniMax se centran directamente en la persona de 'Carmack', y además lo hacen con una acusación directa y muy grave: "Antes de abandonar la compañía, 'Carmack' copió en un USB de forma secreta e ilegal miles de documentos que contenían propiedad intelectual de ZeniMax". En otras palabras: aunque esa tecnología también la había desarrollado él (junto a otras personas), se tomó la licencia de llevárselo consigo y aplicarlo en su nuevo proyecto.
Por otra parte, 'Carmack' no es el único que en esta ocasión ha recibido acusaciones graves y directas. También las ha recibido el ya mencionado 'Pamer Luckey', fundador de Oculus (abril de 2012). Sin embargo, para ZeniMax la historia es muy distinta: ¿cómo fue posible que 'Palmer' mejorara en tan poco tiempo un prototipo que estaba muy verde? Según ellos todo eso solo tiene una explicación: 'Carmack' se había unido a él incuso un mes antes de que Oculus se presentara en la meeting room de ZeniMax, durante el E3 de 2012. ¿Qué significa eso? Que 'Carmack' podría haber utilizado esos documentos robados para mejorar el producto con tan poco tiempo junto a 'Palmer'. Esto es lo que ha comentado ZeniMax en la demanda: "Antes del E3 de 2012 'Oculus Rift' era un prototipo crudo al que le faltaba la montura para la cabeza, el software específico, los sensores de movimiento integrados y muchas otras características esenciales para que el producto fuera realmente fiable".
Tan directa y grave es la acusación, que en consecuencia de lo expuesto en el párrafo anterior, ZeniMax asegura que 'Palmer' es un impostor, y que la historia de que desarrolló Oculus Rift en casa de sus padres es directamente una mentira: "Luckey carecía de la experiencia, el entrenamiento, los recursos y el conocimiento para crear tecnología de realidad virtual que fuera comercialmente viable. Además, sus habilidades de programación eran rudimentarias y dependió de código y juegos de ZeniMax para mostrar el prototipo Rift". Es por eso que ZeniMax lo acusa de no haber colaborado con la compañía en el desarrollo de Oculus; exactamente lo mismo que ocurre con el CEO de la compañía, 'Iribe', que ayudó a fomentar la falsa historia de que 'Luckey' había sido el creador de la tecnología. Todo esto, es la versión de ZeniMax; ahora tocará esperar a ver qué es lo que dicen desde Oculus VR al respecto. Por lo que ha podido saber el medio Eurogamer, estos declararán punto por punto, pero lo harán en los tribunales. La polémica está servida.