El 21 de Marzo 2017 | 15:27
La comunidad YouTuber está repleta de talentosas chicas y mujeres que ofrecen a sus numerosos seguidores todo tipo de contenido de ocio y consejos para el día a día. Normalmente cuando uno piensa en estos creadores de contenido nunca se imagina a un personaje de un manga o anime, pero Hatsune Miku nos enseñó que las ídolos virtuales también tienen capacidad para conquistar cualquier campo que se propongan.
La última fiebre YouTuber en Japón ha sido originada precisamente por una una ídolo virtual, una figura bañada por el colorido pop japonés y de voz real que está cautivando a la comunidad japonesa e internacional. Su nombre es A.I. Kizuna, y gracias a su carisma y su agradable voz ha logrado cosechar casi 200.000 seguidores en tres meses.
Una chica de anime que te habla de juegos y gatos
Se trata de una creadora de contenido multidisciplinar. Tan pronto te habla de temas de interés como se dedica a comentar gameplays. Al ser una YouTuber kawaii, tierna, también habla de gustos tan sencillos como dibujar gatos o muebles que le puedan gustar.
Se suele decir que no serás un gran YouTuber hasta que la administración de la plataforma no te haya borrado un vídeo o baneado temporalmente la cuenta debido a una polémica. El canal de A.I. Kizuna fue baneado tras publicar un vídeo donde bromeaba diciendo que, al ser un holograma, estaba técnicamente desnuda. Tras el "susto" inicial, finalmente su canal fue restaurado y continúa con cada vez más fuerza.
A.I. Kizuna cautiva más allá de las fronteras japonesas gracias a que sus vídeos cuentan con opción de activar subtítulos en varios idiomas, entre ellos el español y el inglés.
Como era de esperar, la creadora de A.I. Kizuna es prácticamente inaccesible, algo lógico teniendo en cuenta que se perdería la magia del concepto de ídolo virtual, aunque se sabe que el modelo del personaje fue realizado en Miku Miku Dance, un programa de animación que permite importar y controlar modelos tridimensionales de personajes.
Esto es 2017, este es el nuevo futuro que nos espera.