El 14 de Mayo 2014 | 10:21
Ayer Microsoft anunció que comenzarían a vender Xbox One sin Kinect por 399 euros a partir del 9 de junio. Hasta la fecha Kinect venía incluido con todas las Xbox One, por lo que todos los usuarios que poseen la consola hoy día tienen el sensor bajo su televisor. Sin embargo, un buen porcentaje de los clientes aterricen a partir de ahora en Xbox One tendrán la consola sin Kinect, por lo que el interfaz del sistema será remodelado pensando en agilizar su uso con el mando tradicional.
Kinect en Xbox One, salvando juegos específicos como el nuevo 'Kinect Sport' o 'Just Dance', estaba principalmente aprovechado como un sistema de control del interfaz, tanto en su vertiente gestual, pero sobre todo por medio de comandos de voz. Jusuf Mehdi, marketing de Xbox, anuncia un remodelado profundo en el interfaz del sistema de cara a agilizar su uso con el mando tradicional.
"Queremos ofrecer alternativas para que algunas de las funciones que hacemos con Kinect sean más fáciles de llevar a cabo con el mando tradicional", explicada Mehdi. "Veréis como haremos un montón de cosas a lo largo de los próximos meses para hacer la experiencia de uso cada vez más sencilla, incluso si no se tiene un Kinect".
Próximas actualizaciones
Desde el lanzamiento de Xbox One ya hemos visto varias actualizaciones importantes en el manejo del interfaz, que han ido incluyendo nuevos elementos, como el indicador de batería, o facilitando procesos, como todo lo relativo a las listas y grupos de amigos.