El 24 de Abril 2015 | 12:17
Con la llegada del mes de abril dio comienzo un nuevo año fiscal y, como no podía ser de otra manera, marcó el momento para que todas las compañías comenzasen a hacer números. En el caso de Xbox One la tesitura es bastante complicada, no porque el sistema esté comportándose mal en el mercado (solo hace falta comparar sus cifras con las de Xbox 360) sino porque hay otro nombre que está eclipsando cualquier movimiento, por muy excelente que sea, del todo en uno de los de Redmond. Hablamos por supuesto de PlayStation 4.
Caída generalizada
Hoy hemos conocido a través de la propia Microsoftlos resultados del primer trimestre de 2015 sobre las ventas de Xbox, sin diferenciar entre One y 360. En comparación con ese mismo periodo en 2014 se ha sufrido una disminución del 20%. Yendo más a fondo, se trata de un paso de 2 millones de consolas distribuidas a 1,6 millones, es decir, 400.000 unidades menos.
A su vez, a nivel de ingresos también vemos una caída relevante; en 2015 los tres primeros meses del calendario han supuesto un 24% menos, generando 281 millones de euros menos. Desde Eurogamer también se habla sobre los motivos de este empequeñecimiento de las arcas de Microsoft, asegurando que la compañía alude estos resultados esencialmente a los bajos ingresos tomados por la marca Xbox.
Sin embargo, no todo es negro en la compañía, puesto que Surface Pro 3 consiguió generar nada menos que 219 millones de dólares, viendo reducidos los niveles de ingresos en un 4%, 72 millones de dólares menos a nivel de informática. Por último, decir que los usuarios de Xbox Live crecieron en un 30%, lo cual es positivo pero también prácticamente necesario para los usuarios de la nueva generación de consolas del estudio americano. Este 2015 se antoja elemental para Microsoft de cara a cómo interpretar su estrategia para el resto de la generación. El E3 nos ayudará a salir de dudas.