Algo está cambiando en el modelo de negocio del videojuego. La dinámica de lanzar un juego a 60 o 70 euros y comprarlo en formato físico, cada vez está más obsoleta. Hoy tenemos millones de vías diferentes para jugar, desde el free-to-play, hasta los juegos por capítulos, títulos por 70 céntimos para móviles, ofertas Steam, Humble Bundle... Miles de nuevos caminos para acceder a nuevos títulos alejados de la tienda clásica.
Ubisoft tiene esto muy en cuenta, y cree que cada vez hay menos hueco en el mercado para grandes super producciones. Jade Raymond declaró al respecto: "Creo que aún hay espacio para juegos realmente triple A, que pueden, a pesar del presupuesto, conservar el modelo clásico y esperar a que la gente pague el gran paquete. Aún hay lugar para eso".
Un golpe de realismo
"Aún así, los grandes publishers hemos de ser honestos con nosotros mismos. Hay lugar, digamos, para unos diez juegos exitosos al año con esta clase de presupuestos".
Parece un golpe de realismo para los grandes productores de juegos. Declaraciones como esta abren las incógnitas de lo que podremos ver la próxima generación. Si en los tiempos de los 128 bits nos hubiesen dicho que esta iba a ser la generación en la que triunfarían los juegos indie y los descargables, no lo hubiésemos creído. ¿Será la próxima, la generación del free-to-play y las microtransacciones?