El 11 de Diciembre 2015 | 18:25
A pesar de que soy un poco escéptico a la hora de este tipo de premios, sobre todo porque el mejor juego del año no tiene porque ser el más popular, sino el que más y mejor te haya hecho sentir, y sobre todo te haya divertido. Creo que hemos vivido uno de los mejores años en cuanto a lanzamiento de videojuegos se refiere. Hacia mucho tiempo que no contábamos con tantos y variados títulos, muchos de ellos rayando la excelencia. Pero si he de decantarme por uno, mi elegido para el GOTY 2015 es 'The Witcher 3'.
Esta tercera parte de las aventuras de Geralt de Rivia ha sido la excepcional conclusión de una de las sagas más míticas que ha dado la industria del videojuego. El mundo que rodea a este brujo, sobre todo por los increíbles relatos que lo acompañan en forma de cómic, ha conformado un mundo único de fantasía, amor, traición y muerte. Para mí, una de las mayores bazas de este título es el toque de magia que ofrece CD Projekt a todos sus proyecto, y que hoy por hoy, lo configuran como uno de los estudios que mejores juegos ofrece en esta competitiva industria.
Un mundo de fantasía
Son muchas las razones por las que me decanto por 'The Witcher 3', su protagonista, su gigante y maravilloso mundo, un apartado visual magnífico a pesar de las polémicas, un historia hilada por una trama cargada de valores y humanidad, una banda sonora sin paragón... Pero sin duda la que más peso tiene en mi argumentación es cómo el título hace sentir al jugador. Este juego nos transporta a un mundo de fantasía, a una oda maravillosa solo entendible para aquellos que han degustado cada ápice de las epopeyas del "Lobo Blanco".
Surcar los bosques o las llanuras a lomos de "Sardinilla" mientras los árboles nos saludan meciendo sus hojas con la tibia brisa de la mañana, previo al enfrentamiento del más vil de los demonios, es una de las experiencias más reconfortantes que he experimentado como jugador.
'The Witcher 3' no es perfecto, pero nada lo es. Cuando algo es bueno, hasta en sus defectos encuentras nuevas oportunidades, lo que ha marcado un nuevo concepto en el devenir del futuro de los RPG europeos. Si no has jugado al GOTY del año todavía, no dudes en incluirlo en tus deseos navideños. No dejes escapar lo que ha sido el fin de una saga mítica y de un juego sobresaliente.
La mejor forma de acabar mi breve pero intenso alegato, es sin duda con palabras del propio Geralt de Rivia:
"No me gustan las grandes palabras -dijo- y sin usar grandes palabras no se le puede describir".