Un exsupervisor de un centro de reparación de Nintendo Switch en EE. UU. afirma que la compañía se vio desbordada por los Joy-Con defectuosos. Si bien es cierto que es Nintendo America la encargada de supervisar las solicitudes de reparación de los clientes, es común la contratación de terceros para llevar a cabo este tipo de servicios, como es el caso de United Radio, con sede en Syracuse, Nueva York.
Un ex empleado le ha comunicado a Kotaku que llegado el momento, "fácilmente podíamos tener miles de Joy-Cons por reparar cada semana. Finalmente tuvimos que preparar un espacio de trabajo completamente nuevo solo para poder reparar los Joy-Con".
Según sabemos, los clientes que enviaron sus Joy-Cons defectuosos entre los años 2017 y 2018 se les enviaron un remplazo nuevo, pero sin embargo después del primer año, United Radio debía reparar los Joy-Cons para reenviarlos a sus propietarios. El exsupervisor afirma que United Radio dependía en gran medida de los trabajadores de la agencia, la mayoría de los cuales no hablaban inglés de forma nativa, lo que generaba problemas de comunicación, una alta rotación de personal y un entorno "muy estresante" que resultaba en "muchos" errores en las reparaciones.
El drift en los Joy-Con es un caso común
El drift en los Joy-Con ha sido un problema bastante común desde que se lanzara la consola en el año 2017, pero fue un tema de debate y de conocimiento popular desde el momento que se presentó una demanda colectiva en EE. UU. en el mes de julio del 2019. Tiempo después, Nintendo se vio obligada a dejar de cobrar por las reparaciones por drift y comenzó a reembolsar a aquellos que ya habían pagado por una reparación, aunque en ese momento la empresa no quiso reconocer el problema de forma pública. Al poco, en junio del año 2020 durante una sesión de preguntas y respuestas de los inversores, el presidente de Nintendo, Shuntaro Furukawa, ofreció la primera disculpa pública por el problema del drift en los Joy-Con.
Desde entonces, Nintendo se ha visto afectada por múltiples demandas por drift que alegan que la compañía es consciente del problema.