Durante los últimos días estamos viendo muchas declaraciones procedentes de los máximos responsables de 'Super Mario Maker', el título que está suponiendo el homenaje por todo lo alto del trigésimo aniversario de 'Super Mario Bros.' y, por ende, el del bigotudo desde que protagonizó su primera obra. 30 años de sueños y saltos, donde todo tuvo que ser inicialmente pensado y premeditado para que las ideas introducidas fuesen atemporales, que no pasaran de moda.
Mar, tierra y aire
Para Takashi Tezuka, la idea de 'Super Mario Bros.' se produjo a partir de la idea de Miyamoto, quien quería crear un personaje que fuese viajando a través del agua, las colinas, el cielo... y que además introdujese acción, lo cual tenía que convertirse en uno de los núcleos principales del juego. Por su parte, las inspiraciones para crear el resto de componentes principales de lo que podríamos considerar el "universo Super Mario", el señor Tezuka comentó lo siguiente a USA Today:
"El personaje de Mario surgió de la idea del señor Miyamoto. Teniendo en cuenta las limitaciones en la paleta de colores y la resolución con la que había que trabajar en las consolas de aquella épica, creímos más conveniente crear a este personaje humano con una nariz enorme, bigote y gorra. Los demás personajes del juego nacieron más o menos de la misma manera.
La función de los personajes fue lo principal; pensamos que sería divertido pisar a los Koopa, pero también añadimos pinchos a Bowser para que no fuese tan sencillo. Peach sólo aparecía a la derecha cuando terminábamos el 'Super Mario Bros. original, y nos centramos principalmente en sus rasgos faciales".
Lo que podemos darnos cuenta a raíz de estas declaraciones es que, por mucho que hayan evolucionado los motores gráficos o estilos visuales, hay premisas que no cambian, lo cual ha permitido que lo que empezaron a jugar a Mario hace veinte años puedan hacerlo hoy sintiendo que todo sigue intacto.