Gracias a su exitosa PlayStation 4 Sony ha registrado en el nuevo año fiscal unos beneficios de aproximadamente 250 millones de dólares, algo totalmente inesperado para la compañía, cuyos números se esperaban algo más bajos.
Un cambio radical
El cambio con respecto al mismo periodo el año pasado ha sido del 95,7%, lo que nos permite hacernos una idea de cómo ha cambiado el panorama. Esto se traduce en 43 millones de dólares de beneficio para la división de consolas frente a 159 millones de pérdidas el año anterior.
Las ventas de sus dos consolas combinadas triplican las cifras de las dos consolas de Microsoft entregadas en el último trimestre. Motivo suficiente para júbilo en la empresa nipona.