El 10 de Abril 2012 | 15:40
Tras la noticia de que Sony podría reducir drásticamente su plantilla por culpa de las malas previsiones financieras en su último año fiscal, todos los ojos se encuentran pendientes del anuncio de cifras concretas. Y parece que son mucho peores de lo esperado.
La empresa ha comunicado que esperan unas pérdidas netas de 520.000 millones de yenes para el año fiscal que acaba de terminar el 31 de marzo. Algo que suponen unos 4.870 millones de euros, una cifra que dobla las previsiones que tenían en febrero.
Las pérdidas más grandes de la década
El jueves 12 de abril el presidente de la compañía, Kazuo Hirai, ha organizado una reunión en la que el punto estrella serán los peores datos de la última década para Sony, y sus planes por los que contrarrestarán los 95.000 millones de yenes que piensan perder con estos resultados por unos 180.000 millones de yenes que pronostican para el siguiente.
También conoceremos si al final se hará efectivo el despido de 10.000 trabajadores de la compañía como se venía rumoreando, algo que afectaría al 6% de la plantilla.