Sony ya forma parte de las compañías que quiere combatir a las organizaciones terroristas aportando su granito de arena. La empresa compartirá con el FBI los datos de aquellos usuarios que sean sospechosos de pertenecer a una organización criminal o terrorista. El primer caso se ha dado esta misma semana y la organización federal ya ha podido acceder a los datos de un jugador del que se cree puede ser un peligro potencial.
La llave de la solución
Las plataformas bajo la marca PlayStation se han sumado a la justicia norteamericana para intentar cortar de raíz cualquier posible ataque criminal. Sony ya ha empezado a compartir con el FBI los datos de usuarios de los que se sospeche por posible actividad terrorista. La compañía japonesa se suma así a otras grandes como Microsoft, Yahoo o Facebook en la lucha contra el terrorismo facilitando a las autoridades federales los datos de algunos de sus usuarios.
Sony ha entrado de lleno en esta dinámica con un primer caso de un posible criminal entre sus jugadores. El FBI ya ha recibido información por parte de la compañía de un usuario que planeaba volar desde Kansas hasta Oriente Medio con el supuesto objetivo de unirse a una organización terrorista. Entre los datos facilitados se encuentra su historial de compras, sus mensajes en PlayStation 3 y PlayStation 4 y la información relativa a los dispositivos relacionados con las consolas.
Esta investigación comenzó a raíz de una llamada de la madre de este usuario a la policía. La mujer pensaba que su hijo quería unirse a algún tipo de organización y el joven fue interceptado en Egipto con la intención de sumarse a las filas de un grupo llamado The Strangers. Posteriormente, se resolvió que el usuario de 22 años no tenía ninguna intención terrorista, pero ya había sido condenado a cuatro años de prisión por falsificación de pasaporte.