En las últimas horas el crunch o las jornadas con horarios abusivos en el desarrollo de videojuegos han estado muy de actualidad debido a casos como el de Rockstar Games y sus jornadas de 100 horas semanales, un tema que el propio Dan Houser ha querido aclarar después. Y ahora es Sega la que saca el tema después de presentar sus resultados financieros (vía ResetEra) y desvelar que han reducido las jornadas extra en un 80%.
El primer paso hacia el camino correcto
Aunque un 80% parece bastante lo cierto es que Sega sigue teniendo un problema con esto ya que han reconocido que siguen empleando jornadas de 60 horas semanales, lo que nos situaría en jornadas de 12 horas al día.
Aún así la reducción de horas de trabajo en una empresa japonesa es aún más meritoria que en una Europea dado el problema que el país asiático tiene con la cultura del trabajo y la cruzada que los derechos laborales allí no consiguen superar.
No deja de ser positivo que se empiece a hablar abiertamente de este problema que ya moviliza a miles de desarrolladores y jugadores en todo el mundo, como hemos podido comprobar en las últimas horas.
Game Workers Unite es una de las muchas organizaciones que lucha por la unión de desarrolladores para hacer frente a estas prácticas que poco a poco van haciendo que veteranos de la industria abandonen sus puestos de trabajo y que nuevos talentos se sientan repelidos al contemplar la posibilidad de acabar atrapados en este tipo de desarrollos que llevan a horarios de trabajo que atentan contra la salud.
Poco a poco se está medrando para acabar con prácticas surgidas de la necesidad de cumplir con unos calendarios irreales y unas expectativas que la comunidad de jugadores no ayuda a mantener en el campo de lo razonable con diversas pataletas cuando se retrasa el lanzamiento de turno.