Por Marco Gonzálvez
El 4 de Noviembre 2017 | 01:12
Estos días habréis visto numerosas noticias sobre cifras, ventas y demás parafernalia correspondiente a la parte de industria de este medio que es el de los videojuegos. Eso es porque estamos en esa mágica fecha del año en el que se pasa revisión a las cuentas, se queda a cenar con los accionistas y se hace caja. En este proceso quienes no parecen haber quedado muy satisfechos son los chinos de Perfect World Entertainment.
Expectativas incumplidas
La revisión económica de la editora ha resultado en el cierre de dos estudios como son Motiga y Runic Games. Creadores del relativamente reciente 'Gigantic' y padres de la saga 'Torchlight' respectivamente.
Los motivos dados desde la empresa propietaria de estos estudios apuntan a que únicamente quieren centrarse en potenciar los "juegos como servicio", ese modelo de negocio infernal que parece estar canibalizando cualquier otra alternativa en el mercado.
Si bien en el caso de Motiga lo anunciado es una reducción de plantilla (vía Kotaku), lo que realmente quedará del estudio es una reducido grupo de mantenimiento para asegurarse de que el juego sigue funcionando hasta que en un futuro (estimamos que cercano) cierre por completo sus servidores. En el caso de Runic Games la venta del estudio es total y ahora queda a espera de que otra gran empresa se interese en su compra. De hecho en un comunicado que también puede leerse en Kotaku los empleados del estudio independiente buscan trabajo.
Por último es en IGN España donde leemos que Cryptic Studios, responsables de 'Neverwinter', también estaría en serios problemas dado que también son propiedad del gigante chino. Esto último no ha sido aún confirmado.