Que el PC es la plataforma que está resurgiendo como plataforma de juegos gracias a Steam y demás tiendas, es algo que está fuera de toda duda para casi todos. Sin embargo, uno de los problemas que presenta el PC como plataforma es que si alguien quiere explotar al máximo el potencial gráfico de los juegos más punteros, debe mejorar la potencia de su torre con una instalación que no todos están dispuestos a asumir debido a los riesgos que puede haber.
Atualizar será mas fácil
Ene l CES de Las vegas, el fabricante Razer presentó el Proyecto Christine, una torreta pensada para el juego en PC, que se difeenciará del resto al ser una torreta modular. Esto significa que sus componentes como la tarjeta gráfica o el procesador pueden ser cambiados al vuelo y sin precisar de conocimientos de tecnología previos.
La arquitectura de PCI-Express del Proyecto Christine sincronizará automáticamente los componentes que el usuario decida, y pese a ésto, será viable instalar en él en múltiples sistemas operativos según las necesidades del usuario. Todo los módulos conectados al esqueleto PCI-Express pueden añadirse en cualquier orden o combinación, ya sean tarjetas gráficas, múltiples SSD o componentes de almacenamiento RAID, o incluso fuentes de alimentación, lo que da una máxima flexibilidad.
Al ser un diseño sin cables, cada módulo sellado está dedicado dentro de su apartado y posee un sistema de refrigeración liquida, así como cancelación del sonido, que permite hacer overclocking de componentes sin la necesidad de tocar su composición de fabrica, a la vez que se guarda la garantía. Se trata de una idea interesante y muy ambiciosa para impulsar el mercado de juegos en PC, pero el principal problema será el precio al que estarán los componentes al estar dedicados a una plataforma específica, y que necesitará de más apoyo que por parte de Razer para seguir funcionando a largo plazo.