El 4 de July 2018 | 15:47
Si seguís la actualidad de Zonared, sabréis de sobra que soy un gran apasionado de todo lo retro (ahí está el Podcast para calmar vuestras ansias si sentís lo mismo). Y como buen jugador "tradicional", aún recuerdo con mucho cariño la incursión de 'Quake III Arena'. O mejor dicho, de aquella primera versión del juego, que llegó a múltiples plataformas y que en consola supuso un antes y un después para el género y la industria. Por un lado, porque en Dreamcast supuso la revolución del online en consolas, y por otro porque el de PS2 demostró que los modos de juego normalmente destinados al online, también pueden ser divertidos jugando en solitario si la IA de los enemigos acompaña.
Igual que los humanos
Quizás por eso tiene mucho más mérito que hablemos del asunto hoy. Justo cuando han desarrollado una IA capaz de mejorar el rendimiento de los bots hasta límites insospechados. O en otras palabras, hasta conseguir que su comportamiento sea prácticamente el mismo que el de los jugadores humanos. Lo han conseguido los equipos de investigación de la compañía DeepMind de Google, quienes han finalizado con éxito una serie de pruebas en el juego 'Quake III Arena', incluyendo partidas en las que humanos han jugado contra esos bots. De hecho, este estudio ha sido realizado como parte de la experimentación habitual que realizan desde DeepMind. Es decir, que han utilizado los videojuegos como "conejito de indias" para mostrar cómo resolver problemas que pueden surgir a la hora de programar.
Pero no deja de ser importante el hecho de que a través de esta tarea de aprendizaje, la IA del videojuego también ha mejorado muchísimo. Incluso, una de las pruebas que realizaron, incluía un torneo de hasta 40 jugadores, en el cual se emparejaban de manera aleatoria los jugadores humanos con los bots. Y la sorpresa fue mayúscula cuando descubrieron que el ratio de victorias de los bots era mayor que el de los humanos, que por cierto eran jugadores experimentados y reconocidos del juego. Sin duda, un gran avance que, más allá del propio 'Quake', puede ser un gran paso de cara a la mejora en la IA del futuro (tanto en videojuegos como en otras facetas).