El 6 de Junio 2015 | 09:42
La batalla generacional continúa. Desde que se pusieran a la venta tanto Xbox One como PlayStation 4 en los últimos compases de 2013, la gente ha podido sopesar con tranquilidad cuál de las dos era su opción preferida.
Siempre habrá quien se lance a por las dos, pero tal y como están las cosas lo más probable es que la disyuntiva entre Sony y Microsoft se haga ahora más patente que nunca. Así pues, vamos a comprobar qué tienen que decir los usuarios de todo el mundo ante las grandes protagonistas en el ámbito doméstico en esta octava generación de consolas.
Diferencia cada vez mayor en todo el mundo
En primer lugar, cabe decir que los datos que vamos a interpretar fechan hasta el 30 de abril de 2015, por lo que no se incluyen los datos de mayo. Para ver cómo han evolucionado las cosas en los últimos dos meses, vamos a rescatar el dato de mayor relevancia del informe de febrero proporcionado por VGChartz. Por aquel entonces, la diferencia entre PlayStation 4 y Xbox Oneera de 8.58 millones de unidades; la máquina de Sony sumaba ya 20.22 millones en 16 meses, mientras que la de Redmond hacía lo propio con sus 11.64 millones y un mes más en las tiendas.
Durante el último mes de abril la diferencia se ha visto aumentada en 376.725 unidades, un incremento menor que en el resto de meses de 2015, donde se llegó a a alcanzar prácticamente el medio millón de unidades cada 30 días. Así pues, en estos momentos PlayStation 4 supera a Xbox One en 9.886.022 unidades tras exactamente 18 meses en el mercado, una situación que Sony hubiera firmado sin dudarlo hace dos años. A su vez, PS4 acumula nada menos que 22.389.944 unidades (datos aproximados según las fuentes de esta web), mientras que el todo en uno de los americanos suma 12.503.922.
Si se mantiene este ritmo, la consola nipona podría llegar a doblar en ventas, literalmente, a su competidora, algo que Sony no dejaría de lado, pues de cara a una campaña publicitaria es información muy trascendente a nivel comercial. Es el turno de mover ficha; se acerca el momento más importante del año. En 2013, Microsoft se catapultó a sí misma, así que una vez más toca redimirse y tratar de revertir una situación que cada vez pinta mejor para la marca PlayStation.