El 25 de Enero 2013 | 13:22
Tras su periodo de servicio en Afganistán, el Príncipe Harry de Inglaterra ha vuelto a su país y ha prestado declaración frente a los medios para hablar de sus experiencia en combate real, a los mandos del armamento de un helicóptero de combate AH-64 Apache.
El secreto está en los pulgares
A muchos no les sorprenderá que las palabras de este joven fuesen un tanto incorrectas para pertenecer a la familia real. Cuando hablaba de un combate en el que tuvo que acabar con la vida de un talibán declaró, "soy alguien a quien le gusta jugar con PlayStation y Xbox así que me gusta pensar que que soy bastante útil con mis pulgares".
Ante esto, un miembro representante de los talibanes no perdió el tiempo para contestar a estas palabras. "Esta es una guerra seria, histórica, de resistencia para nosotros, para nuestro pueblo. Y ahora viene este príncipe y lo compara con sus juegos o su PlayStation o lo que sea que haya dicho. No nos tomamos muy en serio sus declaraciones ya que hemos visto a muchos soldados ocupantes venir a Afganistán y desarrollar alguna clase de problema mental".
Algunos periodistas han puesto el grito en el cielo ante lo que dijo el Príncipe Harry ya que resulta muy insultante resumir la barbarie de la guerra en una burda comparación con el entretenimiento que aportan los videojuegos.
Tan pronto como se encendió la mecha, el hermano menor de William volvió a presentarse frente a los medios para rebajar el tono de sus palabras y hablar del gran trabajo que las tropas están haciendo allí.